La producción mundial de granadas se sitúa en torno a 2.150.000 toneladas, una cantidad escasa si la comparamos con la de cítricos, que alcanza los 100 millones de toneladas. Según José Francisco Sales, responsable del área técnica de la Asociación Valenciana de Agricultura (AVA-Asaja), esa fruta es un cultivo relativamente minoritario, aunque ha entrado en fase de expansión en los últimos años debido a que diversos estudios, sobre todo en Estados Unidos, han determinado que se trata de un alimento funcional con muchos componentes beneficiosos para la salud, sobre todo por su elevada concentración de antioxidantes.

Según un reciente estudio de esta organización agraria, Irán y la India son los dos principales productores mundiales de este fruto que también se cultiva en China, Turquía, Israel y, en menor medida, en países como Chile, Perú o Argentina. Buena prueba del interés creciente que despierta el granado la constituye el hecho de que Estados Unidos haya multiplicado por cuatro su producción en los últimos tiempos o que Turquía lo haya hecho por dos. En EE UU, el 80 % de su producción se dedica a la elaboración de zumos. Aunque existen unas 500 variedades de granado, la hegemónica es la llamada wonderful, que se usa sobre todo para fines industriales.

En España, la Comunitat Valenciana aglutina el 90 % de la producción de granado y la variedad preponderante es la mollar de Elx, seguida de la valenciana. La variedad mollar, y también la valenciana, son más dulces que la wonderful (bastante más ácida) y resultan especialmente adecuadas para su consumo en fresco. En las comarcas de la Safor y la Ribera se ha iniciado una expansión, si bien la presencia es mayor en el Vinalopó.

Los datos oficiales constatan el interés por estos cultivos alternativos. La superficie de cultivo en España ha crecido un 32 % entre los años 2004 y 2012, según los datos del Ministerio de Agricultura, al pasar de 2.200 hectáreas a más de 3.350 que ofrecen una producción de unas 40.00 toneladas y de la cual se exporta en torno al 60 % de la misma. Europa es su principal mercado, aunque ya se han hecho las primeras incursiones en Rusia y también en Asia (Singapur y Malasia).

Los precios se duplican

«El granado no va a resolver los problemas de la agricultura, pero es una alternativa a tener en cuenta y a valorar por parte de los agricultores», explica Sales. Uno de los grandes atractivos del granado son los precios, pues se han duplicado durante la última década. Si en el año 2000 el precio medio por kilogramo se situaba en 0,39 céntimo de euros, durante el ejercicio pasado alcanzó los 0,80 céntimos por kilogramo. La variedad mollar se ha probado en zonas de la Ribera y la Safor y su comportamiento es bueno, si bien en algunas zonas presenta su particularidades como pueda serlo el retraso de quince días en la producción respecto a las áreas productoras de Alicante.

«Entre los retos más inmediatos para este cultivo figuran la necesidad de mejorar su rendimiento, las técnicas de cultivo y el manejo postcosecha, así como apostar por la investigación, la mejora de variedades y de los canales y estrategias de comercialización. En este sentido, uno de los inconvenientes del granado es que sigue siendo un gran desconocido para el gran público», reconoce Sales.

El Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) ya ha tomado cartas en al asunto y está trabajando en la mejora de la cualidades del granado para prolongar al máximo el período de producción, que se recolecta entre finales de agosto y noviembre. Sin duda, un peródo muy corto para abastecer el mercado durante todo el año.

El jefe de sección del servicio de Desarrollo Tecnológico del IVIA, Julián Bartual, ha desarrollado dos líneas de investigación: una basada en la selección clonal y la otra en el cruzamiento de variedades para sintetizar así los aspectos más positivos de algunas de ellas en otra nueva. Las tres nuevas variedades que han resultado más atractivas y que se encuentran en fase más avanzada de desarrollo son la «IVIAGRANA V 111», la «IVIAGRANA M 55» y la «IVIAGRANA M 48». Todas ellas ya están registradas y actualmente se encuentran superando la fase de cuarentena. Ahora tan solo falta acordar y concretar con los viveristas cuándo puede comenzar la reproducción con fines comerciales.