­­­­­­El Cristo de Quart reunió una vez más a centenares de personas en su ermita. La tradicional «baixà» y el posterior almuerzo popular contó ayer con una afluencia masiva.

A pesar del debate previo que el grupo municipal de EU introdujo este año sobre la participación de los ediles en actos religiosos, la alcaldesa Pilar Álvarez y sus compañeros del grupo socialista en el gobierno local volvieron a cerrar la procesión junto a los ediles del PP, en la oposición. De este modo, los socialistas se desmarcaron de sus socios de EU, que no acudieron con la comitiva municipal tras haber propuesto sin éxito en el último pleno «la necesidad de separar» la gestión municipal de los actos religiosos pues, aunque buscaban unanimidad, en la votación se quedaron solos. «Queríamos que quedase clara la división Iglesia-Estado; no se trata de polemizar, sino ser consecuentes con los tiempos que vivimos. Cada cual a nivel particular puede participar de cuanto considere oportuno; pero como ayuntamiento consideramos importante que no sea así», apuntaba Manel Marco desde el grupo de EU. No obstante, tanto sus socios del PSPV como el PP, en la oposición, rechazaron la iniciativa aludiendo, entre otras cosas, a la justificación histórica o el peso de la tradición en la celebración del Cristo en Quart.

Ajena a este debate, la procesión del Cristo recorrió un año más todos los rincones de Quart acompañada especialmente de los clavarios de honor 2015, Juan Claudio Pérez Díaz y Almudena Escriche Llopis, dos personas del municipio sumamente comprometidas con la fiesta y reconocidas por los vecinos de La Vall de Segó.

Las fiestas de Quart de les Valls seguirán esta semana con actos taurinos, orquestas y un baile de disfraces muy participado.