El Partido Popular e Iniciativa Porteña han criticado el retraso en la puesta en marcha del Plan de Empleo de Sagunt, que debería haber comenzado el pasado jueves. Para los primeros es «una falta de responsabilidad el no haber realizado las tareas que el pleno encomendó al equipo de gobierno en julio, ya que todavía no están seleccionadas las personas que trabajará», lamentaba Sergio Muniesa.
Tanto PP como IP han lamentado las consecuencia que este retraso generará. Mientras el exalcalde alertaba de que «las personas a las que contrate el ayuntamiento no trabajarán los tres meses acordados, como en años anteriores», los segregacionistas iban más allá recordando que el retraso puede obligar a buscar otras fuentes de financiación de este plan. «Lo que marca la norma es que el superávit puedes utilizarlo para pagar facturas o las nóminas de estos trabajadores, hasta el 31 de diciembre, por lo que habrá que buscar otras fuentes de financiación o directamente acabar los contratos sin completar los tres meses», advertía Manolo González.
Ambos partidos también han criticado la ausencia de comisiones, «tan solo una» para tratar este asunto, reunión que se realizó «con absoluta improvisación y sin contar con la experiencia que podíamos haber aportado desde los partidos de la oposición», decía González, a quien se suma el portavoz del PP, que recuerda que cuando ellos gobernaban no sólo estaba en marcha el Plan de Empleo en octubre sino que «se habían celebrado infinidad de comisiones informativas, con el fin de aclarar y determinar cuantas cuestiones derivaran de los proyectos que se había acordado por la mayoría de los grupos políticos». A esto añaden que también fueron pactados y debatidos con los agentes sociales, los comerciantes y las asociaciones en varias reuniones del Consejo Económico y Social.
Mientras que desde IP hablan de «gestión desastrosa», los populares culpan al tripartito de «falta de implicación. Este equipo de gobierno, formado por 16 liberados, siendo el más caro de la democracia, no tiene excusas para no tener a punto el Plan de Empleo», además de lamentar el «oscurantismo y falta de trasparencia», críticas secundadas por ambos grupos que aseguran no conocer todavía las obras que se van llevar a cabo.
Tanto populares como segregacionistas auguran el inicio del plan de empleo para finales de octubre de lo que responsabilizan al alcalde, al no haber un delegado de la materia.
Respuesta de Fernández
El alcalde de Sagunt, Quico Fernández ha respondido a las acusaciones del PP e IP aclarando que «la mayor parte de los trabajos ya ha comenzado», al mismo tiempo que desmiente le necesidad de buscar alternativas de financiación o que los contratados lo harán por un periodo inferior de tres meses. «En el Plan de Empleo hay tanto unos márgenes de tiempo para su comienzo como unos para su finalización y éste no acabará el 30 de diciembre», decía atendiendo a un informe elaborado al respeto por el interventor.
Fernández da la razón a populares y segregacionistas en que muchas de las obras no se han negociado con la oposición, pero recuerda que la mayoría de ellas «son actuaciones que no se habían llevado a cabo y que ya estaban contempladas en los planes de empleo anteriores, que no se pusieron en marcha por el pacto entre PP e IP», aclaraba.
El presidente de la corporación local insiste en que «el equipo de gobierno ha tenido muy poco margen para negociar las obras y seleccionar el personal».
