El Ayuntamiento de Estivella ha introducido una modificación en su ordenanza de convivencia, que entrará en vigor el próximo viernes y se refiere a los niveles de ruido permitidos durante el día y la noche. Concretamente, esta normativa contempla un máximo de 55 decibelios en el primer caso, que abarca desde las 8 hasta las 22 horas, y 45 en el segundo, durante el resto de la jornada, siempre en las zonas donde el uso dominante sea el residencial.
En esta modificación también queda definida que la multa por incumplir estos rangos de ruido acarreará una sanción de 50 euros, que «es la misma que en el resto de supuestos de la ordenanza», según explica el alcalde de la localidad de la Baronia, Rafa Mateu.
El presidente de la corporación local también apunta que «en épocas y lugares determinadas, se registraban más ruidos de los lógicos, así que, en respuesta a las quejas vecinales recibidas en el ayuntamiento, decidimos legislar esta circunstancia». Mateu añade que «los umbrales recogidos son los mismos que ya están en la ley, pero hemos querido incluirlo en la ordenanza para que la gente lo conozca».
Después de la aprobación provisional de este cambio, que tuvo lugar en el pleno de septiembre, y tras su publicación oficial, el alcalde informa que no ha tenido necesidad de advertir a ningún infractor. Hasta que la ordenanza reciba el visto bueno definitivo se mantiene abierto el plazo para la presentación de alegaciones.
