El robo registrado en un horno de Sagunt se saldó con más de 2.000 euros en daños.
Los ladrones se llevaron la caja registradora con el cambio del día, el teléfono móvil del establecimiento y juegos de llaves de varios locales de la cadena de hornos a la que pertenece el local, lo que ha obligado a los propietarios a cambiar todas las cerraduras, con unos gastos valorados en más de 2.000 euros, ya que a esto hay que sumar la rotura de cristales.Los intrusos lograron acceder al establecimiento tras romper el cristal de la puerta de entrada. Una vez dentro, los delincuentes cogieron la caja registradora y el móvil, aunque abrieron varios cajones del establecimiento en busca de dinero y otros utensilios de valor que no encontraron.
A la entrada o a la salida, los autores del robo debieron cortarse con el cristal, ya que había sangre en el local, tal y como han revelado los propietarios a Levante-EMV. «Nos dijeron que se iba a personar la Policía Judicial para tomar huellas pero no ha venido todavía», comentaba ayer el gerente de la cadena, Manuel Andrés quien denunció los hechos a la Policía Nacional el mismo sábado cuando se detectó el robo.
De momento, los dueños no tienen sospecha de nadie y aseguran que tampoco les ha informado de nada la Policía Nacional que sigue con la investigación.
Ésta no es la primera vez que la cadena de hornos Amparín sufre un robo o registra daños por acción de los ladrones. El mismo establecimiento de la calle los Huertos fue objeto de un intento de sustracción el pasado verano que acabó con la rotura de uno de los cristales.
También el otro dispensador de pan y dulces que tenían en la Partida de la Oliba sufrió un hurto, aunque en ese caso, se pilló al ladrón; un menor de edad que acumulaba más de veinte juicios, tal y como ha revelado Andrés. A esto se suman varios robos en la cafetería Plaza, que también pertenece al negocio familiar.
Ante esta situación, el gerente de la empresa solicita «mayor presencia policial» con tal de evitar en lo posible nuevos hechos como estos.
