La enorme crecida de varios de los barrancos y afluentes del río Palància como el Barranco de Azuébar, el Río Chico o las ramblas Seca y de Capuchinos hicieron que, en escasas horas, la maquinaria de varios trabajadores que se encontraban trabajando en la presa de Algar realizando la adecuación de la Sèquia Major de Sagunt quedasen totalmente inundadas por el agua. Se trata de tres camiones, dos excavadoras giratorias, una pala frontal y un rodillo compactador que se vieron totalmente anegados por el cauce debido a las fuertes lluvias que cayeron a primera hora de la mañana de ayer.
Y es que, como explicaba uno de los afectados, Raúl Conde, «nos han avisado alrededor de las 12,30 horas de lo que estaba pasando y que habían abierto las compuertas del Regajo, por lo que hemos ido corriendo hasta la presa y ya hemos visto cómo el agua había cubierto prácticamente todo».
Esta falta de cualquier comunicación previa es lo que también irritaba a otro de los propietarios de la maquinaria que ayer quedó totalmente cubierta por unos tres metros de agua. «Llevamos un mes trabajando allí y dejando las máquinas en ese lugar, pero nadie nos avisó de que hubiera preemergencia ni de nada. Creo que es una imprudencia muy grave porque si llegamos a estar trabajando, no sé qué hubiera pasado», decía.
Raúl Conde daba por seguro que su camión «ya no sirve para nada». Por ello, él, junto con sus compañeros mostraba su indignación porque «ya que la presa cuenta con un vigilante, nos podían haber llamado para que los quitásemos que los teléfonos los pone en todas las puertas». Y es que, justamente ayer, el sector de la construcción celebró fiesta, por lo que durante todo el día no tenían previsto asistir a trabajar. Los afectados pensaban presentar las denuncias pertinentes para ver qué hacer porque «aquí estaba todo y ya está todo perdido, nuestro trabajo, nuestras cosas y ahora a ver qué hacemos y cómo se cubre esto». Con respecto a los daños económicos, explicaban que «no sabemos decir, pero si piensas que cada uno de los camiones valen 50.000 euros de segunda mano, pues imagina».
Los jóvenes acudieron hasta la presa del Regajo para pedir explicaciones al respecto, aunque el responsable les comunicó que, por el momento, el agua del Regajo no había llegado hasta la presa del Algar todavía, por lo que la crecida se vio dada por el propio cauce y los afluentes de aguas debajo de la presa de Jérica. Atendiendo a la apertura parcial de puertas, el caudal aumentaría a lo largo de la tarde.
Vecinos de Algar de Palància confirmaron a Levante-EMV que en la localidad ya hubo lluvias abundantes a las 4 de la madrugada de ayer, acompañadas por fuertes vientos. Por ello, hubo quien se acercó por la mañana a la presa a ver la crecida del río y vio con sorpresa que no se habían retirado las máquinas que trabajaban en la Sèquia Major. «La verdad es que nos sorprendió que siguieran allí, porque ya por la noche había llovido mucho y era previsible», decía la mujer.
Al margen de las precipitaciones en Algar, lo que al parecer desencadenó una mayor e «inesperada» crecida fueron los más de 130 litros por metro cuadrado registrados entre Sot de Ferrer y Algar de Palància. Sea como sea, los daños se temían cuantiosos y mayores a los 350.000 ?.
