El pleno de Canet d'En Berenguer aprobó el pliego de condiciones para adjudicar a una empresa privada el servicio de recaudación. Una vez conocidos los requisitos para aspirar al contrato, el portavoz de Compromís, Ximo Pons, acusó al equipo popular de gobierno de elaborar los pliegos a medida de la actual empresa recaudadora con el objetivo de volver a concederle el servicio.

El nacionalista criticó que el porcentaje de beneficio para la adjudicataria se sitúa ahora en un 3,4 % e insistió en que «esto está amañado. Este porcentaje lo ha puesto la empresa para seguir cobrando lo mismo que hasta ahora», denunciaba el líder de Compromís en Canet. Pons pidió al alcalde, Leandro Benito, que dejara abierto el porcentaje de beneficio y que cada empresa que se presenta decida hasta dónde puede bajar, volviendo a incidir en la idea de que con el 3,4 % «les salen los cálculos» a la actual adjudicataria, acusaciones que el popular negó y tildó de «barbaridad». A esto añadió que los pliegos técnicos también estaban hechos para ella puesto que «todo lo que ustedes piden, la empresa ya lo tiene, asegurando que se le va a volver a adjudicar y si no, al tiempo», dijo.

Pese a las advertencias del edil, los votos del PSPV y de Ciudadanos permitieron al equipo de gobierno del PP sacar adelante el punto justificando en caso de Ciudadanos que la propuesta estaba avalada por los técnicos y en el del socialista con un informe sobre la situación del mercado y los costos del servicio que había realizado el partido.

La nueva adjudicataria se embolsará cerca de 1,8 millones de euros, si agota los tres años de contrato más otros tres de prórroga, tal y como se recoge en los pliegos, a razón de 360.000 euros anuales. Parte de la oposición tildó este gasto de «innecesario para las arcas municipales», dejando clara su apuesta por el modelo recaudatorio público a través de una oficina municipal. «Por mucho gasto que esta supusiera, estoy seguro de que no son 360.000 euros anuales», adelantaba el edil de Iniciativa Playa de Canet (IPC), Carlos Sáez. En la misma dirección se manifestó el portavoz de Si Se puede Canet, José Marco, quien añadió que el gasto de la oficina municipal se amortizaría en el tiempo y que éste no sería ni similar al que supone para el ayuntamiento la empresa privada que «se forra a costa del municipio». Marco también recriminó al PP que no hubiera llevado al pleno un estudio serio del coste del servicio municipal para justificar la apuesta por la empresa privada.

Desde Esquerra Unida, Mª Amor Uviedo, argumentó en el mismo sentido y puso el ejemplo de Sagunt, donde «el servicio público funciona muy bien con solo seis personas, por lo que aquí el costo no sería tan grande».

Hasta el momento, la empresa se llevaba un porcentaje sobre lo recaudado de un 4,5 %. La intención del gobierno es rebajarlo hasta el 3,4 % tal y como se recoge en los pliegos, que marcan el techo más alto en un 4 % y el más bajo en un 3,4 %, primando la propuesta económica por encima de la técnica para garantizar este segundo y conseguir un ahorro de cerca de 100.000 euros anuales.

Plazo de adjudicación

Además del debate de números, Joaquín Rambla, de Agrupación Ciudadanos Canet, solicitó que se rebajara de tres a dos el tiempo de contrato para que durante ese periodo se estudiara la viabilidad de la oficina municipal, petición que no fue aceptada, como tampoco la de incorporar a todos los partidos en la mesa de contratación como Uviedo (EU) solicitó para garantizar la transparencia.

Además del ahorro, el equipo de gobierno basó la defensa de la opción privada en la efectividad, desvelando que la diputación recauda el 85 % frente al 95 % de la empresa de Canet. También puso en duda la efectividad de una oficina municipal. «Hasta 10 puntos menos se atribuye a la recaudación pública», dijo Benito, quien insistió en la importancia de recaudar pese a que el beneficio de la empresa sea mayor.