Iniciativa Porteña defenderá en el pleno de hoy que el Ayuntamiento de Sagunt habilite antes de final de año una partida por encima de los 30.000 euros para «resarcir de manera definitiva» al CD Acero por la instalación del césped artificial del Fornás. Y es que, después de que el club recibiera en varias anualidades 115.000 euros de las arcas municipales como compensación por financiar este proyecto, una sentencia condenó a la entidad rojiblanca a abonar 28.295 euros por «excesos de unidades de obra y obras nuevas que no estaban incluidas en el contrato de ejecución», cantidad a la que se suman los intereses acumulados en cuatro años y las costas procesales.

Según manifiestan los segregacionistas, este fallo, dictado por el juzgado de primera instancia número 2 de Sagunt, es la última consecuencia del «despropósito» que supuso el convenio firmado en 2006 entre el ayuntamiento y el CD Acero, que «aparte de ser discriminatorio para el club», según Manuel González, supuso que fuera la entidad porteña la que firmara el contrato del césped artificial, cuando «se trata de una instalación deportiva de propiedad municipal».

Aquel acuerdo firmado hace casi 9 años por los entonces alcaldesa, Gloria Calero, y presidente acerista, José María Ramírez, reflejaba las dudas sobre el futuro del Fornás como instalación deportiva o como zona verde y residencial, así como las prisas rojiblancos por tener césped artificial hasta el punto de renunciar a la aportación del principal patrocinador y a las subvenciones municipales de varios ejercicios con tal de ejecutar esta mejora en su terreno de juego.

Sagunt asume la obra

Posteriormente y cuando el césped artificial se fue extendiendo, gracias a un programa de la Diputación de Valencia, el ayuntamiento, también a propuesta de IP, reconoció el trato «absolutamente discriminatorio» al que se sometía a los rojiblancos con respecto a otros clubes, de tal forma que acordó «asumir la totalidad de la obra de la colocación del césped en el Fornás y que al CD Acero se le repongan con efecto retroactivo todos los derechos a los que renunció».

En el contexto de este acuerdo, que se aprobó con el voto favorable de todos los grupos a excepción de Compromís, que se abstuvo, los segregacionistas reclamarán esta tarde al resto de formaciones, entre las que ahora también están ADN Morvedre y C's, el pago de la condena como último abono a favor del Acero para dejar al fin liquidadas una obras que acabaron costando más de 300.000 euros.