Los extrabajadores de Bosal se concentraron ayer frente a la fábrica de tubos de escape en Sagunt al cumplirse un año de su cierre. Además de decenas de los 222 empleados que la multinacional dejó en la calle, varios representantes del ayuntamiento, encabezados por la teniente alcalde, Teresa Garcia, estuvieron presentes para informar sobre las acciones que se están desarrollando desde la Generalitat.
El presidente del comité de empresa, Antonio González, reconoce que la concentración de ayer supuso «un pequeño respiro» al comprobar que «las cosas se están moviendo». En cualquier caso, el extrabajador de Bosal admite que «vemos nuestro futuro con gran preocupación y hay momentos en que nos desmoralizamos», especialmente después de la resolución del concurso de acreedores de hace unas semanas, que supuso el fin oficial de la relación laboral con la empresa.
Y es que, como reconocía el propio González en declaraciones a Levante-EMV, «en muchos momentos nos hemos sentido instrumentos electorales de los políticos, en quienes siempre hemos encontrado buenas intenciones, pero se han quedado ahí». El presidente del comité de empresa apuntaba en esta línea que «un año después del cierre de la planta, lo único que tenemos es el reconocimiento del juez de una deuda a la que tiene que hacer frente la empresa, pero que tendremos que recurrir a la jurisdicción laboral para intentar cobrarla».
«Nosotros ya hemos llegado hasta donde podíamos „añade González„ y ahora falta que las administraciones cumplan con sus obligaciones». En este línea y después de la «confianza» que les transmitió ayer Teresa Garcia, los extrabajadores de Bosal confían en poder acogerse al Fondo Europeo de Adaptación a la Globalización (FEAG), que se encarga de tramitar la Generalitat tras recabar toda la documentación, así como a la línea genérica de ayudas del Ministerio de Empleo.
Más concentraciones
Los concejales María Giménez, Sergio Moreno y José Vicente Muñoz también acudieron a la concentración de ayer, que se repetirá más formalmente el próximo martes para reunir a todos los extrabajadores de Bosal y darles los detalles de las opciones que tienen abiertas. Por su parte, los exempleados de la multinacional tienen intención de repetir todos los miércoles las concentraciones frente a la planta.
