La junta directiva de Ciudadanos en Sagunt decidió a última hora de ayer que su voto en el pleno de los presupuestos, que se celebra hoy, será negativo, con lo que cerró la última puerta del tripartito para aprobar sus cuentas.
Y es que, si un inesperado giro de los socialistas no lo evita, después de que en la comisión que dictaminaba las cuentas volviera a rechazarlas, la oposición hará valer su mayoría para tumbar el presupuesto y obligar así al gobierno municipal a prorrogar otra vez las previsiones de 2009.
El portavoz de C's, Raúl Castillo, explicaba a Levante-EMV que «no queremos asumir la responsabilidad del déficit de estas cuentas, ya que el gobierno no nos transmite la confianza suficiente para asegurar que los gastos no superarán a la recaudación». Y todo ello después de que Compromís, EU y ADN Morvedre aceptaran rebajar su previsión de ingresos en 2 millones de euros por los 4 que reclamaba C's.
Pero además del componente económico, Castillo reconoce que en su decisión también hay una vertiente política, ya que en el tripartito «hay un partido antagonista al nuestro y dos que traspasan nuestras líneas rojas, así que creemos que lo que hemos conseguido en la negociación no es suficiente para facilitarles la aprobación del presupuesto».
Un mensaje de texto del portavoz de C's a la concejala de Hacienda, Teresa Garcia, en el que le comunicaba la decisión provocó una airada reacción por parte del gobierno, cuyo alcalde, Quico Fernández, aseguraba que «la postura de Ciudadanos es inaceptable desde un punto de vista personal y de ética política». Y es que, según el nacionalista, «Raúl Castillo y Blanca Peris nos dieron su palabra de que, si revocábamos la aprobación por junta de gobierno y modificábamos las cuentas, se abstendrían», facilitando así la luz verde a las cuentas por mayoría simple.
Inservibles políticamente
Sin embargo «han incumplido su palabra, dando muestras de una falta de credibilidad que demuestra que son inservibles para la política», en referencia a los ediles de C's, con quienes anunció que «rompemos las relaciones». Otro aspecto que destaca Fernández es que Ciudadanos «demuestra que le da más importancia a las directrices y disciplina de su partido que a Sagunt», además de «dejar patente su carácter conservador con miembros fascistoides y su carácter antivalenciano».
Garcia, por su parte, aseguraba tener ya «pocas esperanzas» de aprobar hoy el presupuesto y reiteró que «no me responsabilizo de las cuentas prorrogadas. Se ha constatado el bloqueo de la oposición —aseguró a este rotativo— y prefiero seguir sin presupuestos hasta cuando haga falta que volver a los de 2009».
La responsable de Hacienda también admitió sentirse «timada» por Ciudadanos, al que acusó de rechazar el apoyo a las cuentas «por sus prejuicios. Han demostrado —prosigue— que no son más que un hacendado del PP».
En cuanto a un acuerdo con el PSPV, Garcia reconocía que «con la nueva ejecutiva local se abre una nueva línea de trabajo y negociación».
