Varios vecinos del Port de Sagunt han interpuesto una denuncia en la Policía Nacional por un posible envenenamiento masivo de perros en el pipican situado frente al cementerio de este núcleo. Se trata de los propietarios de siete animales, que aseguran que sus mascotas han sido envenenadas en esta zona con «raticida, tal y como nos han dicho los veterinarios», afirmaba una afectada.
El veneno ha provocado la muerte de uno de los perros y el ingreso en distintas clínicas veterinarias de los seis restantes, donde uno de los animales ha estado en una «situación crítica, casi una semana con goteros».
Los denunciantes quiere que «se abra una investigación y que se dé con los culpables», a los que acusan de «cometer un delito contra a salud pública, ya que hasta este pipican vienen muchos niños con sus mascotas y también ellos están en peligro».
Los vecinos han puesto los hechos en conocimiento de la concejala de Sanidad de Sagunt, María Giménez, quien se ha interesado por lo sucedido y la salud de los animales, yendo hasta la clínica veterinaria a preguntar. La edila de ADN Morvedre ha revelado a Levante-EMV que su departamento va a trabajar con la Policía Local para abrir una investigación y descubrir lo sucedido.
Estos siete perros coinciden todas las tardes en el mismo pipican, lo que llevó a sus amos a sospechar del «envenenamiento masivo», ya que todos los canes comenzaron a ponerse enfermos al mismo tiempo y con los mismos síntomas.
Los afectados han colocado un cartel en el recinto en el que avisan de que las acciones tienen penas de cárcel y advierten del peligro de los hechos: «En el parque entran niños que van con sus padres y sus mascotas. El fallecido podría haber sido un niño», reza en el cartel. «Esto es un delito y el causante no saldrá impune», se puede leer también en el escrito.
