El Ayuntamiento de Sagunt tiene previsto retirar esta mañana un depósito de agua de fibrocemento que se había depositado en la vía pública, junto a unos contenedores próximos al CEIP María Yocasta en Port de Sagunt.

La delegada de Medio Ambiente, Teresa Garcia, recuerda que la retirada de estos residuos tienen que hacerla empresas especializadas y que está penado no responsabilizarse de estos residuos de «alta peligrosidad», por lo que advierte que estas prácticas serán objeto de la máxima sanción. «Está absolutamente prohibido depositar amianto en la vía pública, en contenedores de obra o en cualquier otro lugar no autorizado», anunciaba.

Recientemente el ayuntamiento ha abierto también una investigación en una obra menor donde aparecieron piezas de fibrocemento en un contenedor de escombros, que se comprobó que no correspondían a la obra, pero que se habían depositado de manera ilegal. Finalmente la empresa que ejecutaba la obra se encargó de su tratamiento de forma adecuada.

Igualmente, la nacionalista ha añadido que se mandará una carta informativa, junto con las solicitudes de licencia de obra, recordando la peligrosidad que genera el fibrocemento y su forma correcta de gestión. También el alcalde dictará un bando para informar a la población.

La edila recordaba que el fibrocemento o uralita «es un residuo muy peligroso, respirar sus fibras puede provocar graves consecuencias para la salud, como la amiantosis (con la que se seca el tejido pulmonar), el cáncer de pulmón, de pleura, y del peritoneo, así como la asbestosis, que ocasiona graves dificultades respiratorias y que puede provocar la muerte».