La falta de aseos públicos en el Castillo de Sagunt ha vuelto a evidenciarse en esta Semana Santa. En un recinto de casi un kilómetro de longitud, el urinario más cercano está en el Teatro Romano, pues el centro de recepción de visitantes acabado en 2010 continúa sin abrir por falta de luz. Por ello, estos días no han faltado mujeres mayores que tenían que orinar al aire libre en algún rincón. Como afirmaba un portavoz de Voluntarios por el Patrimonio, Paco Herráiz: «Yo me quedé sin poder entrar por la zona de la Ciudadela porque un señor me pidió que, por favor, esperara porque unas mujeres se habían ido a orinar porque no podían más... Yo, lógicamente, lo entendí sin problemas pero es de vergüenza», comentaba.
