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Denuncias de tráfico de la Guardia Rural desatan quejas en Sagunt

Algunos afectados cuestionan las competencias en zonas urbanas que el alcalde sí defiende

Denuncias de tráfico de la Guardia Rural desatan quejas en Sagunt

Las multas de tráfico en las que aparecen como denunciantes agentes de la Guardia Rural de Sagunt han desatado quejas vecinales por considerar que estos no tienen competencia para hacerlo, aunque desde el cuerpo y el mismo alcalde, Quico Fernández, lo defienden. Varios vecinos afectados han iniciado una campaña por las redes sociales con el objetivo de unirse y hacer más fuerza e incluso «poner una denuncia colectiva» contra una práctica que consideran «ilegal», al producirse en el ámbito urbano y no en el rural, donde estos agentes tienen toda su competencia, sostienen.

De hecho, cuando en el catálogo municipal de puestos de trabajo se definen las funciones de este cuerpo se dice que son principalmente la «realización de tareas de vigilancia y custodia en el ámbito rural del término municipal de Sagunto», además de «la colaboración, en el ejercicio de sus funciones, con las fuerzas y cuerpos de seguridad y la autoridad judicial, en la denuncia de posibles infracciones administrativas o conductas que pudieran ser constitutivas de delito o falta en el medio rural».

Según ha podido conocer Levante-EMV, la Guardia Rural aparece como «denunciante» en decenas de estas multas que se han tramitado por infracciones de tráfico cometidas en zonas urbanas.

Este rotativo ha tenido acceso a varias de estas sanciones, donde en el detalle de la liquidación se anotan, como lugar donde ha tenido lugar la infracción, calles y vías del casco urbano como la calle Alcalde Blasco en el margen norte del Palancia, entre otras. En cuanto al hecho denunciado, una multa es por «no respetar una marca longitudinal continua, sin causa justificada» apareciendo como denunciante la «Guardia Rural» y el número del agente.

Ademas de en esta zona, los agentes también han denunciado infracciones cometidas en la Avenida de la Vila, por detrás de un conocido hipermercado donde se han registrado varios casos de cruzar la raya continua para acceder a la zona educativa situada junto a ese centro comercial.

Estas acciones han provocado la reacción de varios grupos políticos que han pedido explicaciones sobre los hechos. Uno de ellos es Iniciativa Porteña, que ha convocado para hoy una rueda de prensa sobre las «presuntas irregularidades» que, a su juicio, estarían cometiendo los agentes rurales con estas prácticas.

Sin embargo, el alcalde y responsable del Consell Local Agrari, del que dependen los guardias, Quico Fernández, negó en declaraciones a este diario que los agentes hayan cursado las denuncias, porque «no tienen facultad para hacerlo», asegurando que se han limitado a informar a la Policia Local sobre la comisión de infracciones mientras «ha sido la policía la que las ha tramitado».

Fernández explica que el mero hecho de que en la sanción aparezca como denunciante la Guardia Rural no significa que hayan sido agentes de ese cuerpo los responsables de tramitarla ni que multen ellos; «cualquier persona puede ser el denunciante, pero seguro que a nadie le ha llegado una multa de tráfico de la Guardia Rural, sí de la Policía», matizaba.

El jefe de la Guardia Rural, Jose Maria Martínez, se ha pronunciado en el mismo sentido que lo ha hecho el alcalde, aclarando que «tenemos competencia para denunciar en cualquier ámbito al igual que todo el mundo», aunque matiza que no la tienen para tramitar ni para sancionar, por lo que afirmaba tajante: «Nunca lo hemos hecho».

Martínez justifica el revuelo que se ha montado en una confusión de conceptos, insistiendo de nuevo en que sí que pueden denunciar y que por eso aparecen como denunciantes en las sanciones. «Nosotros hemos llevado muchas denuncias a la Dirección General de Tráfico y nos las han tramitado todas, si no pudiéramos hacerlo, esto no habría sido posible. Y así lo llevamos haciendo desde hace cinco años».

Zona de peligro

Respecto a la carretera de la Vila, donde han denunciado varias infracciones y de donde provienen la mayor parte de las quejas, el jefe de la Guardia Rural justifica la presencia de sus agentes en «los peligros» que la zona entraña, un extremo que ha llevado a que el cuerpo redacte un informe dirigido al responsable del departamento de Tráfico solicitando medidas. «Nosotros en el Consell Agrari hemos recibido muchas quejas por parte de agricultores sobre adelantamientos con raya continua o por cruces de vehículos cuando está prohibido», decía. Actuaciones que han estado a punto de generar accidentes, ya que es una zona de mucho tránsito de agricultores al estar pegada a propiedades principalmente citrícolas, explicaba Martínez.

A esto se suman los robos que ha habido en esa partida, «lo que ha llevado a que incrementemos la vigilancia en la zona», decía para después recalcar: «Pero quiero dejar claro que no estamos para controlar la circulación, para eso está la Policía Local».

A ello añadía que el informe a tráfico ha derivado en la instalación de una señal de prohibido cruzar, con la que se intenta prevenir accidentes.

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