Decenas de extrabajadores de Bosal están de nuevo concentrados a las puertas de los juzgados de Sagunt, donde hoy está previsto que declaren varios directivos de la multinacional tras la querella presentada por CC OO en respuesta el cierre de la planta en la capital de El Camp de Morvedre, que supuso el despido de más de 220 personas sin ningún tipo de indemnización.

El primero en acudir ha sido Raúl Gil, exdirector de la fábrica de Sagunt, quien ha sido recibido por los exempleados con abucheos e insultos, a los que él ha respondido «con su habitual prepotencia, con una sonrisa de desafío», según aseguran fuentes sindicales.

A lo largo de la mañana también está previsto que acudan a los juzgados José Vicente Correcher, apoderado de la firma, Miguel Vidal, director financiero, así como el presidente de la compañía belga y administrador único, aunque estos últimos no habían confirmado su asistencia.

Esta serie de declaraciones estaba programada para hace unas semanas, pero el juzgado dio más tiempo a los comparecientes para analizar la documentación de la querella.