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Medio Ambiente

El parque de la Calderona urge al Consell a acabar con los vertidos ilegales de Sant Esperit

El área recreativa que gestiona la propia Conselleria de Medio Ambiente lleva años tirando las aguas sucias al subsuelo, al igual que el monasterio

Instalaciones del área recreativa en un estado de deterioro. Levante-EMV

El director de la Junta Rectora del parque natural de la Sierra Calderona, Carlos Ferris, ha instado de forma urgente a la Conselleria de Medio Ambiente para que solucione el vertido de aguas sucias del área recreativa de Sant Esperit al subsuelo.

Ferris aseguraba «desconocer» la situación, tal y como ha revelado a Levante-EMV hasta la reunión que mantuvo hace unos días con el alcalde de la localidad, Salva Costa y el prior del monasterio Franciscano, Fernando Hueso, cuya hospedería padece el mismo problema.

El responsable de la junta rectora urgía la salida a «este grave problema» que su juicio no se puede seguir dilatando.

De hecho, ya ha puesto en conocimiento del área forestal de la conselleria el asunto, al mismo tiempo que ha encargado al consistorio de Gilet la redacción de una memora técnica valorada en la que se recoja la solución a esta práctica, nada respetuosa con el Medio Ambiente, un aspecto que llama especialmente la atención cuando es la misma conselleria la que gestiona este área recreativa, mirando hacia otro lado durante años, pese a ser la zona la entrada al parque natural.

La propuesta que se baraja para las aguas es la contrucción de una tubería que conecte el pozo ciego a la rede de fecales municipal, «un proyecto en el que están trabajando los técnicos» y al que ha dado el visto bueno Ferris, el ayuntamiento y el monasterio. «La solución es bien sencilla y no supone un gran coste y yo creo que la conselleria va esta dirección», decía.

Los vertidos al subsuelo se pusieron en conocimiento de la administración autonómica por parte del ayuntamiento hace meses, «sin que hayamos obtenido respuesta», afirmaba el alcalde de Gilet.

La hospedería destapa el tema

La rehabilitación de la hospedería del monasterio de Sant Esperit destapó el asunto cuando la inspección técnica municipal recogió en su informe la ausencia de una red para las aguas fecales en este edificio, lo que suponía una traba para otorgar la licencia de actividad para la obra. En la misma situación estaba el área recreativa, que vierte las aguas sucias al mismo pozo que el monasterio, que está en propiedad de éste

En el pleno de marzo de 2015, la corporación municipal de Gilet aprobó en pleno instar al monasterio a la instalación de alcantarillado y la conexión de éste a la red municipal de aguas fecales, al mismo tiempo que a la conselleria, sin embrago tras más de un año desde este requerimiento, todo sigue igual.

Desde la orden franciscana se explica que la inversión debe realizarse al menos entre las dos partes y se niega a que la conducción recaiga sobre las espaldas de la orden; mientras, conselleria no responde.

Ante la falta de respuestas de la administración, los franciscanos decidieron hacer una propuesta que está encima de la mesa de la Conselleria de Medio Ambiente hace más de un mes, que se concreta en la instalación de una depuradora para su propiedad, con capacidad para depurar solo sus aguas, lo que dejaría al área recreativa con un grave problema al no poder dar salida a sus fecales.

Sin embargo, el director de la junta rectora del parque aboga por conectar todo a la red municipal un proyecto para el que se buscaría financiación, explicaba. Una solución que ve como «la más viable y sencilla para todos»

Ahora se está a al espera de que Medio Ambiente dé el visto bueno.

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