El Ayuntamiento de Sagunt tiene varias fases en marcha para completar el borde sur del Port de Sagunt, concretamente las inmediaciones del pabellón José Veral en la avenida 3 de abril.
Mientras prosiguen las obras que dotarán a esta zona de espacios verdes y de esparcimiento, entre los que destaca un circuito de carreras a pie de unos 700 metros, con zonas más rápidas y otras más lentas por las que también se podrá pasear, la ampliación y mejora del campo de fútbol del Biensa sólo está pendiente de la firma del convenio entre el consistorio y la Federación de Fútbol de la Comunidad Valenciana para sacar a concurso la redacción del proyecto, según reconoce el concejal de Urbanismo de Sagunt, Pablo Abelleira.
Esta actuación, que permitirá aumentar las dimensiones del terreno de juego para dar cabida a los equipos de fútbol 11, así como equiparlo con césped artificial, costará cerca de 250.000 euros, según fuentes municipales, cantidad que será financiada entre el ayuntamiento y la federación. Esta remodelación, que aplaca las reivindicaciones históricas del club porteño, será la guinda en la reforma de toda la zona, donde la cesión de una parcela de la Diputación de Valencia ha permitido conectar los espacios verdes, así como el carril bici.
Este borde urbano del Port también está pendiente del proyecto para la construcción de la sede de la Fundación de Trabajadores de la Siderurgia Integral, que quedaría ubicada al este del José Veral y muy cerca también de donde se ha proyectado la estación del tren de pasajeros hasta el Port.
Otro proyectos
Además del campo de fútbol de Biensa y dentro de la gestión de gobierno acordada por el tripartito, otros dos proyectos están pendientes de los últimos flecos para salir a licitación. Se trata tanto del cubrimiento de la pista de hockey del polideportivo internúcleos como de la adecuación del trinquet comarcal de Sagunt. Estas dos iniciativas esperan contar con subvenciones tanto de la Generalitat como de la diputación para ponerse en marcha. Así, una de las cuestiones pendientes sería el césped artificial en el campo de San Francisco de Borja, una inversión que deberá esperar hasta resolver cuestiones urbanísticas.
