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Nuevo curso

El retraso en las obras obliga a mandar a casa a los alumnos de infantil de Vilamar

Entre las cinco clases afectadas se encuentra la destinada desde el pasado curso a la escolarización de los niños de 2 años

El retraso en las obras obliga a mandar a casa a los alumnos de infantil de Vilamar

Los cerca de 100 alumnos matriculados en las cinco clases correspondientes a los cuatro cursos de educación infantil del colegio Vilamar del Port de Sagunt no empezarán el curso hasta el lunes, después de que tanto ayer como hoy haya sido imposible, debido al estado que presenta el centro mientras se ultiman las obras de adecuación de los baños.

Los propios padres fueron los que decidieron no dejar a sus hijos al comprobar, con la compañía del profesorado, que el colegio no estaba en condiciones, una ausencia que se repetirá hoy, según confirman desde la asociación de madres y padres de alumnos (Ampa).

Y es que, además de incumplir incluso el compromiso de tener la actuación finalizada para el primer día de clase, tanto los restos de obra como la falta de tiempo para que el profesorado preparara las aulas para esa jornada, tan especial para los niños entre los 2 y los 5 años, provocaron que la mayoría de padres no dejara a sus hijos en el colegio. Apenas media docena de los más mayores se quedó en clase.

Desde el Ampa se explica que al llegar ayer al colegio «comprobamos el desorden, el amontonamiento de materiales y la suciedad, así que nos volvimos a casa con los niños», no sin antes poner en marcha una recogida de firmas para mandar una queja formal tanto a la Conselleria de Educación como al Ayuntamiento de Sagunt.

Y es que, lo peor, es que el claustro de profesores con el apoyo de los padres solicitó esta misma semana que se aplazara el comienzo de las clases hasta el próximo lunes, petición a la que el consistorio respondió que no tenía competencias para asumir, mientras que el inspector de educación se negó a dar su autorización porque, según le constaba, las obras estaban acabadas.

Normalidad

Más allá del caso de Vilamar, la primera jornada del nuevo curso escolar se desarrolló con normalidad en El Camp de Morvedre, más allá de los problemas conocidos y de los que ayer informó Levante-EMV, como la falta de los profesores de pedagogía terapéutica y los educadores de los colegios María Yocasta Ruiz, Mediterráneo y Vilamar. En los institutos de secundaria y bachillerato de la comarca hubo también el problema de algunas bajas sin cubrir que, según Educación, se subsanarán la próxima semana.

A pesar de esta normalidad generalizada en los ciclos de infantil, primaria y secundaria, los sindicatos han constatado el malestar entre la comunidad educativa. El mayor número de quejas recae sobre la burocracia de la xarxa llibres, puesto que, a pesar de aceptar las ventajas de la propuesta, las órdenes e instrucciones sobre la tramitación han complicado la labor de los responsables.

Desánimo entre los directores

En esta misma línea, el nuevo protocolo de atención sanitaria presentado por la Conselleria de Educación en las instrucciones de inicio de curso, ha desatado el desánimo entre los directores de El Camp de Morvedre que ven cómo se les responsabiliza de tareas que van más allá de su formación y capacitación. «Deberían ser los centros de atención primaria y ambulatorios los responsables del cuidado de los alumnos con enfermedades crónicas y no dejar la responsabilidad sobre los equipos directivos cuya preparación no es adecuada para ello», apunta Vicent Monroig del Sindicat de Treballadors i Treballadores de l'Ensenyament del País Valencià (Stepv) en la comarca.

En cuanto al calor, Educación ha remitido a todos los centros una serie de instrucciones que no ha tenido que llevarse a máximos puesto que las temperaturas no han subido significativamente de los 30 grados.

En les Valls, los colegios también vivieron con total normalidad la jornada de acogida del nuevo curso escolar, así como el IES la Vall de Segó a pesar de contar con algunas bajas no cubiertas de profesorado.

La novedad de la comarca queda registrada en los nuevos ciclos de Formación Profesional de Animación en 3D, que oferta el IES Camp de Morvedre, una apuesta formativa de grado superior que consolida este centro como uno de los pioneros en informática y nuevas tecnologías de la zona. Por su parte, la novedad del IES Eduardo Merello resulta sumamente rica puesto que cuentan con una línea más de FP Básica 2 oportunidad de fabricación y montaje.

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