Una audiencia pública permitió ayer conocer algunos detalles de la gestión del agua en Sagunt, de la que se encargan el ayuntamiento y Aguas de Valencia a través de una empresa mixta creada en 2009. Uno de los principales puntos de ese acto fue la rebaja en la tarifa, que se aprobó en el último consejo de administración de la sociedad y es producto del segundo año consecutivo que acumula Aigües de Sagunt con ganancias en su cuenta de resultados.
El descenso en la tasa se sitúa por encima del 5 % para los usuarios con un calibre de 15 milímetros, según precisan fuentes municipales, que estiman que de esta forma afectará a cerca de 35.000 contadores. Además, otra de las mejoras que se aplicará gracias a la «buena gestión» de la sociedad es una reducción de hasta el 50 % en la tasa de las bocas de incendio, un asunto que todavía está pendiente de someterse a la aprobación plenaria.
Otras cuestiones positivas que se detallaron ayer fueron los cerca de 2 millones que Aigües de Sagunt espera ingresar este año con carácter extraordinario por dos conceptos. El más cuantioso, algo más de 1,4 millones de euros, se corresponde con la deuda que varios ayuntamientos de la comarca y el de Almenara tiene contraída con la empresa mixta de Sagunt en concepto de canon de mantenimiento y otros gastos que se arrastran desde 2011. Sobre esta cuestión, fuentes municipales explican que los consistorios «han mostrado su predisposición a afrontar el pago e incluso alguno ya lo ha adelantado».
Sentencia favorable
Los otros 500.000 euros se corresponden con una sentencia que, en primera instancia, ha dado la razón al Ayuntamiento de Sagunt en el contencioso que mantiene abierto con la Entidad Publica de Saneamiento de Aguas Residuales de la Comunitat Valenciana (Epsar). Este conflicto surgió después de que el ayuntamiento requiriera la regularización de algunas facturas, que la Epsar rechazó y presentó a los tribunales, que han dado la razón a las tesis municipales.
Desde el consistorio se espera que estas dos inyecciones más los buenos resultados económicos de Aigües de Sagunt permitan repetir la bajada de tarifas en los próximos ejercicios. La que se aplicará a partir de 2017 se cimenta en el superávit de casi 310.000 euros con que se cerró 2015, casi diez veces más que las ganancias de un año antes.
Estos dos ejercicios pusieron fin a las pérdidas que la sociedad arrastraba desde su constitución hasta 2013, lo que «afectó negativamente a su situación financiera y patrimonial, habiendo conllevado un elevado nivel de endeudamiento y un fondo de maniobra negativo», según precisa la auditoría de las cuentas de 2015, elaborada por Audival. Este documento también achaca esos resultados negativos «al inicio de la actividad, el aumento de gastos en la compra de agua en alta, así como los costes financieros asociados al elevado endeudamiento».
La empresa de auditorías también valora que el cambio en la tendencia económica de Aigües de Sagunt se debe achacar a «la aprobación de las actualizaciones tarifarias en el servicio de agua potable y alcantarillado y a la implantación de medidas de ajuste en la gestión y de reducción de costes».
Concretamente el resultado positivo de 2015 se explica fundamentalmente con el aumento en la cifra de negocios de la empresa mixta, que superó los 8,1 millones, por los 7,3 de 2014. Los principales incrementos llegaron de la mano de la venta de agua, las obras y mejoras, así como los servicios de mantenimiento de contadores, según las cuentas del pasado año.
Crecimiento de la plantilla
Otros aspectos destacados de esta auditoría son los 171 días que tarda de media la sociedad en pagar a sus proveedores o los casi 614.000 euros que gastó el pasado ejercicio en personal, casi un 30 % más que el año anterior al incrementarse la plantilla a las 17 personas, un titulado, cuatro técnicos, cinco administrativos y siete operarios, por los 13 trabajadores de 2014.
