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Crispín fuerza que la ejecutiva del PSPV decida si pacta en Sagunt

La tensión entre el portavoz del grupo municipal y la secretaria general crecen tras las discrepancias internas

Paco Crispín. Dani Tortajada

El PSPV de Sagunt dejará en manos de la ejecutiva local la continuidad del pacto de gobierno, un hecho significativo después de semanas de negociaciones con acuerdos programáticos .

Desde que el portavoz del grupo municipal y presidente de la ejecutiva, Francisco Crispín, abandonara las conversaciones, justificando su decisión en que «se está negociando a mis espaldas», más de dos semanas han pasado sin que la comisión negociadora del pacto se haya vuelto a reunir, esperando una nueva convocatoria de los socialista, que se producirá o no después de la celebración de la ejecutiva, que fuerza Crispín tras oponerse a algunas de las directrices marcadas por la secretaria general, Nuria Hernández.

La cita con la dirección del partido se hace más que necesaria después de la ruptura existente entre parte del grupo municipal y miembros de la dirección por dos asuntos; la composición de la junta de gobierno, por la que algunos miembros de la ejecutiva apuestan por Natalia Antonino y Miguel Chover, mientras que otros señalan a que sea Crispín y Antonino.

El otro asunto son los liberados, que para Crispín es condición innegociable su reducción. «Si no se reducen no habrá pacto».

Estos serán los dos temas que debatirá la ejecutiva, además de si se continúa con el pacto, ya que existen voces críticas en el partido que apuestan por otras alternativas de estabilidad.

Respecto a este «tira y afloja«, la secretaria general ha dejado claro que la decisión la debe tomar la ejecutiva y que «el grupo municipal está sujeto a la misma».

Hernández también ha aclarado las dudas que Crispín ha generado sobre la legitimidad de la dirección del partido, recordándole que «la tiene toda, ya que fue elegida por los militantes que en es momento tenía la agrupación».

Por su parte, el portavoz municipal lamenta que en todo este proceso de negociación «no haya intervenido la militancia», de lo que responsabiliza a Hernández, además de tener «inactiva a la agrupación socialista. La sede lleva más de dos meses cerrada». A estas críticas añade el incumplimiento del reglamento por parte de ésta, «tiene que convocar una ejecutiva mensual y una asamblea cada seis meses y no lo ha hecho, por lo que los militantes se ha enterado de las negociaciones por la prensa y no por el partido». Ante esta situación pide que «se depuren responsabilidades».

Hernández, respondía que la ejecutiva ha estado informada en todo momento, y respecto a la asamblea, le recueda que se aprobó convocarla después del verano, por lo que «se hará antes de que finalice el año».

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