El alcalde de Sagunt, Quico Fernández, ha asegurado a Levante-EMV que «aún hay posibilidades, queda legislatura», en referencia a un posible pacto de gobierno con los socialistas, pese a que la ejecutiva local lo rechazó, al mismo tiempo que adquiría un compromiso por la estabilidad municipal. Fernández insiste en que las «puertas siguen abiertas, todavía hay posibilidad de apertura y de diálogo».
El mandatario saguntino reconoce que la opción tomada por los socialistas ha sido «toda una sorpresa, porque nos habían asegurado que el pacto estaba cerrado». Pese a que se alegra de su apuesta por la estabilidad, «yo hubiera preferido su entrada en el equipo de gobierno; había buena sintonía».
El alcalde atribuye el cambio de decisión de los socialistas a la situación por la que atraviesa el partido en los ámbitos local y nacional. «La coyuntura nacional ha sido decisiva, porque el pacto estaba avanzado. Habíamos accedido a todas las demandas que nos habían hecho». Sin embargo, el tema de los liberados ha sido uno de los escollos para fraguar el acuerdo con el tripartito, según informaba la secretaria general del PSPV, Nuria Hernández, una tema «complicado con la legislatura tan avanzada y con todo organizado», decía Fernández, quien puntualizaba a este respecto que «estamos dentro de lo que contempla la ley».
Ante la nueva coyuntura, con el PSPV decidido a mantenerse en la oposición, Fernández avanzaba que seguirán buscando entendimiento con ellos como lo han hecho hasta ahora para temas importantes, como el plan de empleo o la aprobación del IBI. «El clima es de buena sintonía y de entendimiento y espero que continúe así».
Hacer mejor las cosas
El mandatario hacía un llamamiento a la reflexión después de todo lo que había sucedido estos días con el registro al ayuntamiento por la Unidad de Delitos Económico (UDEF). «Estamos en un punto de inflexión para hacer mejor las cosas».
