Medio centenar de hosteleros de Sagunt y el Port se ha unido en la Asociación de Hosteleros Unidos del Mediterráneo (Ahum) a raiz de la polémica surgida por la ordenanza de terrazas. Con la «clara vocación» de concentrar a los más de 300 negocios que tiene el sector en la localidad, el colectivo surge con el objetivo de defender sus intereses y «transmitir a la ciudadanía y a las instituciones la capacidad económica y turística que tenemos».

David Gómez es el presidente de la asociación y confía en que «todos los hosteleros nos agrupemos bajo estas siglas. El primer paso, que es asociarnos, ya lo hemos dado, y ahora nuestro objetivo es formar un colectivo fuerte que sea capaz de organizar todo tipo de eventos, tanto para la ciudadanía como para los propios hosteleros».

Uno de los interlocutores clave, señalan desde Ahum, es el Ayuntamiento de Sagunt, con el que «queremos contar a la hora de trabajar, porque, si nos va bien a los hosteleros, le va bien a Sagunto. Si un negocio va bien, generará empleo y necesitará comprar en su entorno, aumentando de esta forma la economía local. Hemos de tener en cuenta que nuestro sector genera más de 2.000 puestos de trabajo directo a los que debemos defender y otros tantos indirectos entre proveedores y servicios contratados».

Sagunt, prosigue Gómez, constituye un destino turístico de primer orden en la Comunitat Valenciana y «los hosteleros queremos ofrecer unos servicios de calidad y adecuados al nivel turístico de la ciudad. Pero no solo estamos orientados a los visitantes, sino también a los vecinos de Sagunto que hace un uso habitual de las instalaciones».