Son muchos los vecinos/as de nuestro pueblo que nos preguntan: ¿No acordásteis por unanimidad el 25 de junio de 2015 que se celebraría un pleno ordinario el último jueves de cada mes? Estamos hartos de bajar y no hay pleno, lo que consideran una burla a los acuerdos municipales. Con ello evitan que la oposición y los vecinos ejerzan la obligación democrática de control y fiscalización a los órganos de gobierno. Se está incumpliendo por parte del alcalde el acuerdo de principio de la legislatura. No se han celebrado plenos ordinarios en Gilet en junio, julio, septiembre ni noviembre. Convocando extraordinarios y urgentes (uno en agosto y otro en octubre) para evitar comisiones informativas, mociones y que los ciudadanos intervengan en ruegos y preguntas.

Esto se puso en evidencia en la sesión extraordinaria y urgente del pleno celebrado el 5 de diciembre, con el punto Informe relativo a modificaciones del IBI para continuar con el debate iniciado por Compromís, que el día 27 de octubre presentó una moción en la cual solicitaba a todos los grupos políticos el apoyo para bajar el coeficiente aplicado del impuesto del IBI del 0,67 % al 0,573 %. El alcalde se comprometió a tratarlo en el próximo pleno ordinario, consultadas las dudas y alegando razones legales y desconocimiento, ya que este ayuntamiento está acogido a un plan de estabilidad económica. También se acordó que tenía que realizarse en el pleno del 24 de noviembre de 2016 para que la moción se ejecutara en caso de ser aprobada, sino no se llegaría en el plazo «porque es obligatoria su publicación en el BOP para poder aplicar esta rebaja del IBI en el ejercicio 2017».

Lo que es sorprendente es que el alcalde, siendo consciente de eso, convocara el 5 de diciembre una sesión extraordinaria y urgente del pleno del Ayuntamiento de Gilet. No entendemos la urgencia, ya que no cumpliría el plazo comprometido, impidiendo aplicar esta rebaja del IBI en 2017. En la votación de la moción nos posicionamos a favor EUPV y Compromís, se abstuvo Ciudadanos y votaron en contra PSOE, PP, AU y la tránsfuga (no adscritos). Con lo que podemos ver la voluntad del gobierno municipal en que se rebaje el IBI, desaprovechando la oportunidad de favorecer a todos los vecinos de nuestro pueblo.

Sorprendente mucho más por su actitud hipócrita, ya que el PSPV presentó una moción en noviembre de 2012 proponiendo, «que debido a la subida enorme del valor catastral que se había producido en todo el término municipal con motivo de la revisión de 2011, se ajustara el tipo impositivo del 0,67 al 0,50, pues con ello se paliaría dicha subida». Curiosamente, el PSPV era consciente cuando hacía dicha propuesta que la deuda viva de Gilet en el 2012 creció 1.153.000 euros y que la deuda de las zonas verdes ascendía a 1.009.831 euros.

Desde EUPV se votó responsablemente ya que se solicitó una y otra vez al alcalde y secretaria la cantidad que dejaría de ingresar el ayuntamiento si bajara el coeficiente del IBI del 0,67 al 0,573. Sólo se nos remitía al informe de Estabilidad Presupuestaria y deuda pública. Nosotros estamos de acuerdo y por ello planteamos una gestión más eficiente, que se ajustaran los gastos, puesto que solo en la partida de fiestas y cultura en 2016 suman 164.978 euros, que nos parece una barbaridad, para la deuda viva que tenemos de 3.340.000 euros.

EUPV desde la responsabilidad quiere destacar que, en el ejercicio 2011, nuestro municipio se vio obligado a realizar una corrección del valor de los inmuebles durante el boom inmobiliario, por lo que sería lo habitual ajustar el tipo impositivo de manera que compense la subida anual del 10 % en los valores de los inmuebles hasta el 2021. La reducción del gravamen podrá ajustar esos valores de los inmuebles a la realidad del mercado actual. Esta decisión puede llegar a tener un impacto importante en los bolsillos de todos los ciudadanos.

EUPV ve justo y objetivo el bajar el coeficiente aplicado del impuesto del IBI del 0,67 % al 0,573 %, porque repercute en todas y cada una de las familias de Gilet.