El Ayuntamiento de Sagunt ha encontrado a los cuatro posibles responsables del mal funcionamiento por «vicios ruinógenos ocultos» en la fuente en Memoria de las Víctimas del Terrorismo de la avenida País Valencià. Esta infraestructura, que apenas ha funcionado durante unos meses desde su inauguración, costó cerca de 350.000 euros procedentes del Plan Confianza de la Generalitat y, casi seis años después de su puesta en marcha, un informe pericial refrenda que «se ha producido la ruina de la fuente al no servir para el fin que fue construida».

El pronunciamiento de este ingeniero técnico industrial es la base del procedimiento de responsabilidad por vicios ocultos iniciado por el ayuntamiento, que quiere determinar así el grado de culpabilidad de cada uno de los actores implicados en la construcción y mantenimiento de esta fuente, a quienes señala como «responsables de forma solidaria, sin perjuicio de cuanto pueda depurarse en la sustanciación del expediente».

Entre estos sujetos se encuentran la empresa que ejecutó los trabajos, Proemisa; la arquitecta que diseñó el proyecto y se encargó de la dirección facultativa, la ahora concejala de Ciudadanos, Blanca Peris; el director de la obra, Manuel Lluesma; así como la responsable de su mantenimiento a partir del primer año desde su puesta en marcha, Aigües de Sagunt.

En el caso de la constructora, el consistorio defiende que, al tratarse de un vicio oculto, el plazo para presentar la reclamación va más allá del año de garantía, aunque requiere que se pruebe que el mal funcionamiento viene motivado por «la impericia, la falta de capacidad profesional o técnica, la negligencia o el incumplimiento de las obligaciones».

Proyecto y mantenimiento

De los técnicos, este procedimiento de responsabilidad señalan que «a veces, la ruina de las obras se produce por vicios del suelo o del proyecto o por errores en los cálculos». De la empresa mixta que gestiona el agua en Sagunt, el expediente recoge que debe determinarse «si la negativa de Aigües de Sagunt a recepcionar la obra, una vez el ayuntamiento había dado luz verde, ha contribuido a los defectos y ruina de la fuente».