Los insultos y descalificaciones en redes sociales del alcalde de Sagunt, Quico Fernández, contra el grupo de Ciudadanos en les Corts en torno a la polémica por el requisito lingüístico le han valido un aluvión de críticas desde la oposición en el ayuntamiento, que le exige disculpas públicas o la dimisión.
Así lo reclama el portavoz local de Cs, Raúl Castillo,
Lejos de disculparse, el alcalde acusa a Castillo de «poca responsabilidad» al «intentar pegarle la vuelta a esto, porque es una manera de encender sentimientos a partir de un comentario que nada tiene que ver con la lengua que habla cada uno, sino con una línea puramente política destinada al grupo de Ciudadanos».
Fernández señala que fue la portavoz de Cs en les Corts, Carolina Punset, quien descalificó a los valenciano parlantes al llamarles aldeanos, y que su sucesor, Alexis Martí, «ha ahondado en las descalificaciones», en una cuestión que «no se limita a la lengua o la identidad, sino que se extiende a la política antivalenciana de Cs».
Sobre su comentario en redes sociales, el alcalde de Sagunt precisa que «hace referencia a un debate en les Corts sobre el requisito de que los funcionarios conozcan las dos lenguas oficiales del País Valencià. No tiene nada que ver con la evidente libertad de cada uno de hablar en la lengua que considere oportuno, como no puede ser de otra forma».
Perfil totalitario
Estas explicaciones no frenaron las críticas, que desde el PP centran en que «los graves insultos son una cortina de humo para ocultar la parálisis e incapacidad de su proyecto». El portavoz popular, Sergio Muniesa, cree que estas descalificaciones son «su forma de expresión ante la falta de argumentos y tolerancia democrática», al tiempo que muestran «su verdadero perfil totalitario».
Por su parte, el portavoz de IP, Manuel González, tiene claro que las descalificaciones del alcalde van dirigidas a Ciudadanos, aunque censura «la manera en la que exterioriza sus pensamientos, llamando paletos provincianos a los políticos de la formación naranja por no saber usar el valenciano. No se da cuenta el alcalde del daño que hace si es que realmente pretende que valenciano y castellano convivan en la Comunidad Valenciana. Con su ataque descerebrado, apunta a todo castellano parlante y francamente conozco a unos cuantos que de paletos provincianos no tienen nada y, en educación y saber estar, le dan mil vueltas al alcalde».
Así, González exige una rectificación a Fernández «por su prepotencia», ya que «ha perdido los papeles». Sobre el tema lingüístico, el segregacionista añade que «IP siempre ha mantenido el máximo respeto a ambas lenguas, algo que no parece entender Compromís».
