«Negativo y pesimista». Así era el balance que ofrecía el alcalde de Sagunt, Quico Fernández, tras la reunión mantenida en Madrid el pasado martes con responsables del Ministerio de Medio Ambiente. Según el nacionalista, «Costas no ha presentado una solución definitiva a la construcción del espigón de Almenara que amenaza con afectar de forma negativa a un segmento de nuestra costa, como es la playa de Almardà». El alcalde estuvo acompañado por compañeros de gobierno y portavoces de la oposición, que mantuvieron el encuentro con la directora general de Sostenibilidad de la Costa, Raquel Orts, y el subdirector general de la Protección de la Costa, Ángel Muñoz.
Según Fernández, el ministerio continua en su línea de retener las grabas de las playas de Almenara optando por el trasvase de arenas para el norte de Sagunt como alternativa a los efectos que este espigón pudiera generar, dejando claro que no hay prevista ninguna obra que dé estabilidad a la costa saguntina. Sobre la respuesta de Costas , el alcalde afima que «nos ha llamado la atención tener que depender de un trasvase de arena, ya que tiene un coste elevado y no es una solución definitiva ni satisfactoria. Pensábamos que se había avanzado en las soluciones, pero la impresión que nos ha dado es que la única alternativa para las playas del norte de Sagunt no es una solución realista».
La construcción del espigón en la playa de Almenara todavía no tiene lugar exacto ni dimensiones, según Fernández, quien añadía que el ministerio «está estudiando las alegaciones del ayuntamiento, así como analizando el impacto medioambiental que esta construcción tendría para tomar una decisión que, de momento, tampoco se sabe cuándo va a tomar».
El alcalde lamenta que «el ministerio no ha dado ninguna solución convincente», al tiempo que advierte de que «se tendrían que tomar medidas en una costa, la de Sagunt, que ya está siendo castigada desde hace décadas por la erosión marina, con las playas de Corinto y Almardà, con problemas de acceso».
En el lado positivo de la balanza tras la reunión del martes, el ministerio se comprometió a dar solución a los accesos a las playas de Almardà y Corinto de cara al verano, así como a estudiar una actuación en la Gola de Quartell para protegerla de la intrusión marina.
Desde la oposición, mientras, PP, IP y Cs exigieron medidas de «estabilización y recuperación» de las playas del norte del Sagunt, como se va a hacer en Almenara. Así, reclaman que las actuaciones sean conjuntas para toda la costa, ya que «no se pueden llevar a cabo acciones que afecten negativamente de una zona de costa a otra.
Además los tres portavoces lamentan que no se haya convocado la comisión de playas, creada en la pasada legislatura, para analizar esta situación, por lo que demandan su urgente convocatoria para tratar otras soluciones.
La oposición en Sagunt destaca que la dirección de Costas ha informado de la estrategia de gestión integral de protección que comprende la costa desde la zona sur de Castelló hasta el Port de Sagunt, que todavía está en fase de estudio de impacto ambiental y se contempla su ejecución a medio plazo, unos cuatro años.
Hasta entonces, «hemos planteado qué acciones se deben adoptar a corto plazo siendo receptivos por parte de Costas a mejorar la actual situación del perfil para su acceso al baño, así como la reposición de la defensa de la gola de Quartell como elemento de protección».
