El fiscal Pablo Ponce debe haberse convertido en la peor pesadilla del exsecretario de Canet d´ En Berenguer, José Antonio Sancho, por los frutos que han venido dando sus investigaciones. Por ello no es extraño que se convirtiera en blanco de la querella que ha acabado archivando el TSJCV.

La razón es doble. El trabajo de Ponce acabó por mantener a Sancho 6 meses en prisión provisional por la denominada «trama de las asesorías» que investiga una red que cobraba ayuntamientos e instituciones por informes incompletos o no realizados. Pero, además, Ponce redactó el escrito de acusación que acabó con la condena del otrora poderoso Sancho a 2 años de cárcel por cohecho en el Ayuntamiento de La Pobla de Farnals; un ingreso de prisión del que sólo se librará Sancho si, finalmente, el Gobierno le concede el indulto, tal y como ha pedido.