Hispania Nostra, asociación que vela por el estado de los monumentos en España, valorará sacar la iglesia de Sant Jaume de Benicalaf de su lista roja después de las peticiones que ha lanzado benavites en esa línea.
El posicionamiento firme del ayuntamiento para recuperar uno de sus monumentos más preciados así como la implicación del equipo redactor del proyecto de restauración de la Iglesia dirigido por Pep Pardo han dado sus frutos. De ahí que, tras salir publicada la lista roja de los monumentos en peligro de derrumbe, Benavites está a punto de lograr que Hispania Nostra retire la calificación de este edificio.
De hecho, las obras de restauración del tejado de la iglesia comienzan el próximo lunes, tal y como ha avanzado el alcalde de Benavites, Carlos Gil, quien ha afirmado que la intervención «será un paso importante en la recuperación del templo».
Para ello, el ayuntamiento cuenta con una subvención de 50.000 euros de la Diputación de Valencia, a través del Servicio de Cooperación Municipal desde la sección de restauración de Bienes Culturales, que llega después de meses de reivindicaciones.
La intervención contempla la reparación de cubiertas del templo con lo que se espera preservar la decoración interior del inmueble; el decorado de las volutas pintadas y sus ábsides. Además, la consolidación de la espadaña y la retirada de elementos que no se corresponden con su época de construcción como el casetón del techo, que mejorará la construcción.
Con el inicio de la intervención en la iglesia, el equipo técnico de Benavites invitará a Carmen Pérez, delegada regional de Hispania Nostra y directora general de Patrimonio entre 1995-99 a visitar las obras e instará a la asociación a la que ella pertenece a reconsiderar el mantenimiento de la Iglesia de Benicalaf entre sus edificios en peligro, lo que se conoce como la lista roja. Tanto los impulsores de la restauración del templo como el ayuntamiento de Benavites reclaman la pertinente retirada del templo de esta lista roja, puesto que los primeros pasos dados en la iglesia manierista del siglo XVIII permiten mayor optimismo respecto de su proyección futura.
El Ayuntamiento de Benavites ha trabajado en la recuperación tanto del entorno del templo de Sant Jaume como de su memoria y presencia entre los vecinos de la Vall de Segó. De ahí, la celebración de las Jornades sobre Benicalaf, en las que durante dos años consecutivos se han presentado ponencias entorno al valor histórico, monumental, arquitectónico, socio-económico y cultural del poblado originario que fue Benicalaf. Tanto en las I Jornades celebradas en 2016, como en las sesiones programadas en 2017, el objetivo era focalizar la atención de los vecinos del Camp de Morvedre en los monumentos de la subcomarca. Las ponencias se centraban en la Iglesia de Sant Jaume pero abrían la posibilidad de aportar luz sobre el sistema de regadío de les Valls o la relación entre poblados como Benicalaf y Benavites. Estas jornadas de valorización del monumento han servido al equipo técnico como reclamo ante la Asociación Hispania, puesto que Benavites ha apostado desde el principio por Benicalaf.
«El problema para intervenir ha sido siempre la dotación económica o bien las dificultades administrativas y los incesantes trámites y paralizaciones a que nos ha sometido la administración» apuntaban desde el equipo técnico que trabaja en la Iglesia de Sant Jaume de Benicalaf y que está formado por Pep Pardo, Luís Cortés, Josep Congost, Jaume Pérez, Sofia Martínez y Adolfo Vigil, quienes tras constatar la publicación del templo de Sant Jaume como uno de los monumentos incluidos en la lista roja de la asociación que vela por los monumentos en España, Hispania Nostra, contactaron de inmediato con Carmen Pérez, contacto que se mantiene.
