Forjar el equilibrio del ecosistema intestinal es la clave para una salud integral; el cuidado de la alimentación prebiótica es, según Jesús Sanchis y Lucía Redondo, el epicentro de su propuesta.
Estos dos dietistas nutricionistas e investigadores apuestan por recuperar la cesta de los alimentos y abandonar el carro de los productos. «En casa sólo cabe comida, ni envasados, ni preparados light o cero. Todo cuanto se nos presenta en paquetitos, rico en? es completamente falso. Una estafa ante la que no deberíamos sucumbir. Volvamos a las frutas, hortalizas y tubérculos como base de una alimentación prebiótica», apuntaba Jesús Sanchis en una charla en el auditorio municipal de Quartell.
En un nuevo libro, este profesional de Quartell presenta, junto a Lucía Redondo, Xavi Cañellas y Xavier Aguado, una serie de recetas elaboradas con alimentos «de verdad». Alimentación prebiótica. Para una microbiota intestinal sana es un paso más en la batalla de estos investigadores por la consolidación de una sociedad sana. En esta ocasión cuatro miradas distintas: Un psiconeuroinmunólogo, una nutricionista especializada en medicina naturista; un cocinero comprometido con los productos ecológicos junto con la propuesta del nutricionista investigador. Cuatro perspectivas que inciden en una misma línea, la clave está en la microbiota intestinal y su cuidado pasa por una alimentación equilibrada cuya base exige un elevado porcentaje de hortalizas, verduras, tubérculos y frutas combinados con legumbres, pescado o carne lo menos sometida posible a tratamiento industrial.
Entre las recetas de estos cuatro expertos destacan consejos dirigidos a padres y madres, a los que se anima a cuidar la ingesta de los menores, así como la necesidad de cuidar el ejercicio físico, el sueño o las relaciones con sus iguales. «Dormir, evitar personas tóxicas, comer alimentos de verdad y no productos, además de tomar el sol. Vemos en clínica numerosos niños con falta de vitamina D, aquí en Valencia, es una constatación horrorosa; dejad que vuestros hijos tomen el sol; hemos pasado del temor al melanoma a estar faltos de vitamina D», apuntaba Jesús Sanchis en Quartell.
Los más de cien asistentes a la charla presentada por Sanchis y Redondo plantearon cuestiones clave como la necesidad de actuar en comedores escolares para velar por este tipo de alimentación; o aspectos más puntuales relacionados con la ingesta de leche, el aceite de coco o las hamburguesas de verdura. Ante planteamientos de este tipo Jesús Sanchis resumía su propuesta anulando de la cesta de la compra todo cuanto se presente en paquetes o envases; busquemos el producto más próximo a nuestra tierra y consumamos aquello que se produce en la temporada. «Si el niño no tiene hambre y no merienda no pasa nada; y si no desayuna, tampoco. Intentemos ser coherentes y vivamos con sentido común», decía.
Los investigadores que han trabajado en este nuevo libro son sumamente críticos con la industria agroalimentaria; «quienes cuentan con la solvencia suficiente pueden ubicarse en una zona determinada de la pirámide de la alimentación. Una recomendación interesada y obsoleta que debemos obviar», apuntaban.
