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Sagunt recurre a los tribunales para que Almenara salde su deuda de 300.000 euros

El resto de ayuntamientos de El Camp de Morvedre ha negociado el abono de los saldos pendientes por el agua

Alcaldes en el consorcio de agua que se celebró recientemente. daniel tortajada

Sagunt se ha cansado de esperar a que el Ayuntamiento de Almenara reconozca y haga frente a la deuda de más de 300.000 euros que acumula en concepto del agua procedente del trasvase Júcar-Túria, conocida como el metro cúbico. Así, a través de la empresa mixta, Aigües de Sagunt, ha recurrido a los tribunales para acelerar este pago.

Este es el caso más extremo de una situación que afecta a varios consistorios de El Camp de Morvedre con los que la capital comarcal se ha mostrado flexible, aunque con 2019 como fecha límite. Así lo reconoce el alcalde de Sagunt, Quico Fernández, quien apunta que, más allá de Almenara, «el resto está en la línea de pagar, aunque algunos piden tiempo».

Sobre este punto, el nacionalista señala que «llevamos dos años en los que hemos intentado regularizar la situación con la máxima flexibilidad, pero ha llegado el momento de que los ayuntamientos hagan un esfuerzo e incluyan la deuda en sus próximos presupuestos». Esa voluntad de pago se ha hecho evidente en algunos casos, que ya a lo largo de este ejercicio se han abonado cantidades que han permitido reducir los cerca de 1,6 millones a los que alcanzaba esta deuda a principios del presente ejercicio.

Por otra parte, la reciente reunión del consorcio de agua, a la que no asistió, entre otros, la alcaldesa de Almenara, sirvió para poner al día a los asistentes sobre las gestiones que conducirán a la configuración de la mancomunidad comarcal, que no solo asumirá competencias con el agua, sino que también servirá para canalizar la solicitud de ayudas europeas o acciones de promoción turística.

Así lo asegura el alcalde de Canet d'En Berenguer, Leandro Benito, quien celebra también el avance a la hora de modificar la concesión de caudales del metro cúbico para ajustarse a la demanda de los municipios. Según el popular, «en época de bonanza, los ayuntamientos nos peleábamos por tener más agua y ahora, con el desarrollo urbanístico paralizado, ocurre lo contrario».

Con esta situación y con «el déficit de agua» en Canet, según el alcalde, mientras a otras localidades, entre las que se encuentran Albalat dels Tarongers y Quartell, les sobra, Benito confía en que «se puedan actualizar las demandas y ajustar los caudales».

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