El Fertiberia vuelve a la acción el sábado con el derbi autonómico que le llevará hasta Benidorm. Desde la penúltima posición, los rojiblancos necesitan el triunfo para no descolgarse, aunque el presidente, Juanjo Bataller, augura que no será nada fácil: «Jugamos en su casa y no somos superiores, así que ellos tienen más posibilidades de ganar».
En cualquier caso, el máximo dirigente de la entidad porteña se muestra confiado en que «en teoría, ahora nos vienen partidos más fáciles» hasta el final de la primera vuelta que, después de dar paso a los octavos de final de la Copa del Rey, pondrá el broche para el balonmano en 2017.
Sobre la complicada situación deportiva que vive el equipo, Bataller apunta que «es un reflejo de los problemas económicos. Hemos demostrado que gestionamos bien la pobreza y por eso aprovechamos la crisis para subir a Asobal. Sin embargo, cuando los demás se van recuperando, nosotros no somos capaces de obtener más recursos».
Y es que, a una semana de la asamblea general de socios, el presidente del Fertiberia explica que «somos muy sensibles a cualquier reducción en los apoyos, como es el caso de la Diputación de Valencia, que todavía no sabemos cuanto nos va a subvencionar para este año».
Esta situación se agrava con cualquier comparativa con los rivales directos en Asobal, como es el caso del Ciudad Encantada de Cuenca o el Guadalajara, que reciben «cerca de 200.000 euros entre la administración autonómica y la provincial, mientras nosotros, el pasado año, apenas alcanzamos los 40.000». El Huesca, el Logroño o el Benidorm, que recibe 260.000 euros del ayuntamiento, son otros ejemplos del mayor respaldo público que reciben los equipos contra los que el Fertiberia compite cada semana.
El caso Boisedu
Mientras, los rojiblancos tienen que hacer encaje de bolillos para suplir cualquier lesión, como ha sido el caso de Alfredo Sorrentino y el fichaje de Johan Boisedu. Y es que al francés, que ya es el máximo goleador del equipo, sólo se le ha podido garantizar el contrato hasta Navidades, ya que no hay dinero para más. De hecho, todavía está en duda si se podrá cerrar su continuidad hasta final de temporada sin generar déficit
