El consorcio zonal de residuos que engloba a los municipios de El Camp de Morvedre, entre otros, ha mostrado su satisfacción por la evolución que sigue el tratamiento de la basura orgánica, que se viene implantando por fases desde finales de 2016. A la espera de que este servicio se haga extensivo a Canet d'En Berenguer y a todo Sagunt, donde ahora solo reciclan estos desechos dos barrios y los grandes productores, Les Valls y La Baronia ya lo tienen en marcha con resultados dispares, aunque en ambos casos con una tendencia positiva, según destacan desde el consorcio.
Entre los datos aportados por este organismo resalta que, en Sagunt, el porcentaje de material impropio que llega adherido a la basura orgánica ha pasado de más del 15 % de hace un año, nivel que se considera el mínimo para poder reutilizarla, a menos del 9 % esta misma semana. En Les Valls, donde se acaba de implantar el servicio, este índice no ha llegado al 7 % en la primera medición, mientras que el único suspenso llega de La Baronia, donde se empezó con un 50 % y se ha reducido recientemente hasta casi el 21 %.
En general «son datos muy positivos y ahora lo que falta es aumentar la cantidad de residuos de este tipo que llegan a la planta de Algímia d'Alfara», apuntan desde el consorcio zonal, que recuerdan que estas instalaciones cuentan con una nave en la que se invirtió cerca de medio millón de euros para el tratamiento de este tipo de desecho.
En esta línea, el concejal de Medio Ambiente de Sagunt, Enric Ariño, apunta en respuesta a las dudas planteadas sobre el aprovechamiento de esta basura que «hay dos maneras de tratarla, pero, de momento y según los responsables de la planta, no se puede hacer hasta que no haya una cantidad suficiente de residuos para optimizar procesos y que no repercuta en lo que cuesta la gestión y por tanto en la tasa que pagamos».
Tratamiento artesanal
En cualquier caso, Ariño apunta que estos desechos «se están tratando de manera más artesanal, con un sistema de control de temperatura e introduciendo unas bacterias para acelerar los procesos de fermentación, por lo que sí que se está haciendo un tratamiento diferenciado del orgánico y que se hará en una escala más tecnificada cuando llegue a un volumen estimado de unas 8.000 toneladas», precisa el nacionalista.
