Estas actuaciones en la seguridad del recinto del castillo culminan las otras actuaciones de urgencia que se estaban realizando en la puerta de Almenara, la zona de accesos a los calabozos, las plazas de la Ciudadela y Dos de Mayo, así como el área próxima al Museo Epigráfico. Con todas estás actuaciones se considera que los riesgos en el monumento han sido eliminados en espera de que desde el ministerio impulse la rehabilitación definitiva.