Jorge estuvo declarando durante cinco horas. Asistido por un abogado, que no es de oficio sino contratado previamente. De la comisaría lo trasladaron hasta la comandancia de Valencia. Allí sigue dando su versión del crimen de Marta Calvo: que fue una muerte accidental. Ha hablado de una noche de cumpleaños con sexo y cocaína que terminó con la vida de la joven de 25 años. Ha asegurado que se asustó y que la descuartizó ese día en la misma casa de Manuel aunque al registrar la vivienda los agentes comprobaron que había sido limpiada con lejía. Jorge ha contado como esparció los trozos del cuerpo de Marta en contenedores de diferentes localidades: además de en Manuel, también se trasladó a Carcaixent y Silla. Un viaje que realizó, antes de intentar desguazar su coche, hace ya casi un mes.