Rakel Cernicharo, propietaria del restaurante Karak en Valencia, fue la última en entrar en el programa de Top Chef y desde ayer la ganadora de la cuarta edición.

La valenciana se impuso a Víctor Gutiérrez, peruano afincado en Salamanca, donde cuenta con un restaurante que lleva su nombre y que luce una estrella Michelin, después de una noche con mucha emoción, nervios y tensión.

Su restaurante Karak (Carrer Baix, 42), se encuentra en pleno centro histórico de València, a escasos minutos de las Torres de Quart, Torres de Serrano y la Plaza de la Reina. Hace unos días, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, eligió su restaurante para comer y colgó en su perfil de Twitter un mensaje de apoyo a la concursante valenciana.

A pesar de su juventud, con tan sólo 22 años abrió su propio restaurante y es una gran conocedora de la cocina colombiana, peruana, mejicana, italiana, tailandesa y japonesa. La fusión de culturas a la hora de cocinar es la clave del éxito de su cocina. Antes de dedicarse de lleno a la restauración, esta rebelde con espíritu artístico se expresaba a través del canto y la pintura, experiencia que plasma en su cocina anárquica, sorprendente y siempre diferente.

El próximo mes de junio y tras ocho meses de negociaciones, instalará su nuevo restaurante Karak en el Hotel One Shot Mercat 09. El restaurante dispondrá de más de 200 m2. Estará ubicado en el bajo del hotel One Shot Mercat 09, cerca del Ayuntamiento y la cadena hotelera quiere que el local se convierta en uno de los más punteros en la ciudad. Por este motivo ha confiado el proyecto de creatividad e interiorismo del local a la empresa valenciana Cul de Sac.