Colin Farrell, intérprete conocido por películas como 'Langosta' o 'Última Lllamada', ingresó la pasada semana en un centro de rehabilitación estadounidense. Lo hizo de forma voluntaria debido al estrés acumulado durante el último año.

La medida preventiva la ha dado con la intención de continuar sobrio, un estado en el que lleva 12 años. Al parecer, Farrell sintió el impulso de consumir otra vez tras un año lleno de rodajes. Por ello, el actor decidió ingresar en una clínica situada en Arizona, y así evitar males mayores.

El centro Meadow ofrece paseos a caballo, prácticas de yoga y taichí, tratamientos de acupuntura y sesiones de meditación. La estancia durante un mes puede llegar a costar 36.000€. Otras caras conocidas como Tiger Woods o Kate Moss también han contado con sus servicios.