Tres medallas de diecisiete participantes es un bagaje muy aseado en la Olimpiadas 2012. El de la delegación valenciana, cuyo mayor valor, sin embargo, fue otro: más de la mitad de ellos regresan con, como mínimo, diploma olímpico. Y a algunos que no lo lograron tampoco se les puede poner muchos peros porque hicieron vibrar y emocionar, como fueron Pablo Herrera (muy mermado físicamente) y Liliana Fernández en la playa de voleibol.

Víctor Claver regresa con una pla­ta, aunque con una participación limitadita, como casi siempre, en la selección de baloncesto, aunque es­tuvo presente hasta en la final. Su mirada ya está puesta en Portland. También tuvo una aportación desde el banquillo Vanessa Amorós al bronce de balonmano, donde brilló extraordinariamente Silvia Navarro, la gran estrella de la actuación de la Comunitat Valenciana.

A David Ferrer se le escurrió

Otra medalla se escurrió entre los agujeros de la raqueta: la del doble de tenis. David Ferrer y Feliciano tuvieron el pase a la final a su alcance y luego ya, desfondados, cedieron en la pelea por el bronce rápidamente.

Las chicas de rítmica quedaron también muy cerca de las medallas con su cuarto puesto, mientras que Sebastián Mora cumplió en el velódromo e Isaac Botella fue, una vez más, el único español en una final por aparatos.

Entre los reveses, quizá haya que detenerse en Eusebio Cáceres. Que no pasara a la final de longitud puede entrar dentro de la pequeña decepción, pero seguro que le habrá dado especial coraje ver que la medalla de plata se quedó en 8.13, baratísima y a su alcance (tiene una mejor marca de 8.27). Sin embargo, con 21 años, tiene todo el futuro por delante.

Ana Carrascosa dejó fríos a todos con su rápida eliminación. Lo peor, de todos modos, fue la agria polémica suscitada con sus «enemigos íntimos», Sugoi Uriarte y Laura Gómez. Precisamente, de los valencia­nos de adopción, Sugoi estuvo muy cerca de la medalla, que mereció. Maya Moore, que ya abandonó el Ciudad Ros Casares, fue oro en baloncesto. Y ya puestos, Dolores Cortés logró bronce y plata con el vestuario de la sincronizada.