En la «Teoría de las catástrofes» se llama así a una discontinuidad severa, un cambio súbito, una ruptura brusca. En ese sentido sería una «catástrofe» lo sucedido entre los funcionarios de algunos centros de trabajo: muchos siguieron en su puesto para no ayudar al Gobierno ahorrándole un día de paga. Un cambio brusco en la historia de las huelgas (nunca se había dado esa motivación para no hacerla) y, por tanto, una «catástrofe». Otra «catástrofe» es que la pasada gripe A ha hecho descender la tasa de mortalidad entre los mayores (y la tasa absoluta), al concentrarse la pandemia en la gente más joven. La tercera «catástrofe» es que desde la base del PSOE algunos pidan la sustitución de Zapatero. Jamás había ocurrido cosa así en el PSOE en el actual período democrático. Ahora ya sólo falta que empiece a llover hacia arriba.