Las inundaciones sufridas en el norte de España vuelven a poner al descubierto la importancia de prevenir este riesgo ambiental. Estos sucesos no son esporádicos: entre 1998 y 2004 se produjeron más de un centenar de inundaciones importantes en España, que causaron 700 víctimas mortales, obligaron al desplazamiento de medio millón de personas y ocasionaron unos 25.000 millones de euros en pérdidas. Y precisamente esta semana, se reunían en la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) expertos de ámbito internacional para avanzar en la definición de técnicas para prever y actuar ante este tipo de emergencias. De hecho, la Unión Europea exigirá antes de 2013 mapas de riesgo a los estados y planes de emergencia para 2015, a través de una nueva directiva de inundaciones. Entre las iniciativas tratadas destacó el proyecto europeo IMPRINTS del Centro de Investigación Aplicada en Hidrometeorología de la UPC, cuyo objetivo es avanzar e el conocimiento de los fenómenos que dan lugar a las inundaciones y a los movimientos repentinos de tierra con el fin de mejorar su predicción.
