Cuándo viene el invierno de verdad? A pesar de que esta semana ya han bajado mucho las temperaturas nocturnas, con inversiones térmicas y heladas débiles y moderadas en el interior, sigue la queja de que de día las temperaturas son «demasiado» agradables para la época. En relación con todo esto creo que conviene destacar dos cuestiones. Por un lado, el año pasado la queja era la misma y debería quedar claro que hay un fenómeno llamado «les minves de gener» o menguas o calmas de enero, bien conocido en el litoral mediterráneo, que habla de un periodo de calma provocado por un persistente anticiclón invernal que, «con su peso», hace quedar al mar liso como un lago, y que incluso provoca una bajada de su nivel de 20 a 40 cm nada menos. ¿Qué opinarán de esto algunos apocalípticos, preocupados por la teórica subida del nivel marítimo mundial a largo plazo por culpa de nuestras emisiones de CO2, cuando un fenómeno tan puntual y natural es capaz de bajarlo tanto en tan poco tiempo? Si tradicionalmente se llaman de «enero», será porque no es tan raro tener este tiempo en esta época. Por otro lado, que nadie se preocupe, este año este persistente anticiclón, que en enero de 2010 provocó problemas en nuestras ciudades al mantener la «boina» de contaminación, no va a durar tanto. Por cierto, esa contaminación causa enfermos y muertos, sí que es muy preocupante, y sí es, seguro, sólo culpa nuestra. Una borrasca atlántica se va a colar a partir del fin de semana en la península por un pasillo que le deja el anticiclón al romperse en dos, y vendrá movimiento seguro, no están claros los cambios que traerá esa primera borrasca ni dónde serán más importantes, pero la puerta quedará abierta para otras situaciones.