Una prestigiosa revista de divulgación científica ha realizado un reportaje de una singular región del planeta, la Depresión de Afar, en África oriental. La región es muy especial en el aspecto geológico, en la intersección de las placas arábiga, somalí y nubia. Por aquí África empieza a partirse en dos y hoy día podemos ver el nacimiento de un nuevo océano. No en vano, el mar Rojo la ha invadido varias veces como testifican los depósitos de sal, uno de los recursos de este inhóspito y duro lugar de la Tierra. Aquí, se encontró a Lucy, el esqueleto del homínido más antiguo del que se tiene noticia. Una tercera originalidad se añade a estas dos ya de por sí destacadas: en esta depresión, concretamente en Dallol, en la frontera de Etiopía con Eritrea, se alcanzan los 34´4 ºC, el récord de promedio térmico del planeta. El más completo compendio de variables se unen para dar estos impresionantes resultados. Situada a unos 14º de latitud norte, apenas recibe lluvias: los vientos alisios al cambiar de hemisferio giran hacia el este y lo que recibe son vientos del continente. Sin lluvias, ni nubes, ni humedad, nada detiene los implacables rayos del sol tropical. De todos es sabido que la altura, disminuye las temperaturas pero el efecto es el contrario, en esta depresión que incluye el punto más bajo de África, el lago Assal, 156 metros por debajo del nivel del mar. Por último, los vientos de lanzan desde el macizo etiope hacia esta depresión, experimentando un considerable calentamiento adiabático. Por si fuera poco, el espectacular panorama térmico se completa con géiseres, calderas y volcanes en activo de entre los que destaca el Monte Dallol y el Erta Ale, con uno de los pocos lagos de lava fundida del planeta. ¿Quién necesita sauna en las puertas del infierno?