La sociedad valenciana es hoy una sociedad abierta e integradora que se ha cimentado sobre principios como tolerancia, interculturalidad, respeto por la diversidad cultural e integración. El Gobierno valenciano, conocedor de esta sensibilidad, desarrolla políticas transversales, ampliamente reconocidas por las propias instituciones europeas, encaminadas a proteger los derechos humanos de las personas de origen extranjero. Es una realidad que nuestras políticas han llevado al Comité de las Regiones a incluir a la Generalitat en la futura red europea de autoridades locales y regionales para la integración de personas extranjeras. Y un hecho, el que la Comisión Europea haya mencionado nuestra labor de manera específica en una Comunicación sobre la Agenda Europea para la Integración de los Nacionales de Terceros Países; asimismo, que nos haya distinguido con el liderazgo español del proyecto europeo «Donde los ríos se unen» en el que participan, además de España, Austria, Italia, Rumanía e Irlanda. Este liderazgo permite que la ciudad de Valencia se convierta durantes los días 10, 11 y 12 de mayo en la capital europea del teatro social con la celebración de un festival internacional para la prevención de la xenofobia y el racismo. Quince talleres de teatro se desarrollarán en distintos puntos de la ciudad y cuatro obras se representarán en el Rialto y en el Escalante.
Un proyecto cuyo título podría ser perfectamente respondido. Si nos preguntáramos dónde se encuentran los ríos podríamos afirmar que, efectivamente, hay un punto donde se unen, la puerta al océano, un punto que los científicos pueden llamar o llaman el subconsciente colectivo, los artistas la voz interna y los místicos el Dios que llevamos dentro. Si utilizáramos los ríos como metáfora, podríamos comparar los mismos con las 141 culturas que habitan en territorio valenciano, con los 62 idiomas que se hablan o con las 18 confesiones religiosas que se profesan, pues tanto los ríos, las culturas, los idiomas o las confesiones religiosas tienen un rumbo dentro de la historia y su propia vida cotidiana.
Precisamente creando un canal de comunicación, se utilizará el teatro como una herramienta de autoexpresión que unirá a mujeres de origen extranjero provenientes de países con culturas diferentes y que viven en Austria, Irlanda, Rumanía, Italia y España. «Donde los ríos se unen» les dará la oportunidad de analizar y expresar los elementos internos y externos que pueden deteriorar la convivencia entre las mujeres acogidas y los ciudadanos nativos de los países acogedores. Sirvan estas líneas para invitar al público a ser parte de una desembocadura en la que mujeres que pertenecen a ríos distintos intentarán buscar un alma en la que no haya distinciones. Mientras tanto, continuaremos trabajando para que la Comunitat Valenciana siga siendo ese delta fértil y lleno de vida, paz y convivencia, que todos los ríos buscan para convivir juntos en el lecho de un océano sereno y apacible.
