Cataluña vuelve a ganar y consigue un tratamiento especial y diferente al resto de Comunidades Autónomas españolas: Su endeudamiento y su déficit será a la medida o, como les ha asegurado el ministro Montoro, será "asimétrico".

"Asimétrico: dícese de cuando alguien saca ventaja respecto de los demás a base de chantajear al Estado”. Esta es, sin duda, la definición de la asimetría que el Gobierno de Rajoy ha garantizado al gobierno de CiU y Artur Más para poder seguir sosteniendo todo su entramado nacionalista a base de los impuestos del resto de España.

El Gobierno de Rajoy pierde y afloja y se trata de que, al menos, el PP local, el que preside la inefable Alicia Sánchez Camacho, saque el máximo rendimiento a esta nueva cesión, para lo cual se escenifica el consiguiente encuentro entre el ministro Montoro como si de un pulso entre el "botox" de una y la mala leche del otro. Puro teatro.

Lo bien cierto es que Cataluña vuelve a mejorar su posición fiscal dentro de España, conseguirá el endeudamiento y déficit a la medida de sus particulares desmanes lo que abre la posibilidad a que su desfase autorizado sea superior al 1,2% del Producto Interior Bruto (PIB) y el resto de comunidades "asimétricas" a pagar el festín de los herederos de Pujol y de su larga estela de corrupción y podredumbre.