Los pensionistas tardaremos al menos 5 años en recuperar la pérdida de poder adquisitivo en solo un año. ¡Horroroso! Ahora bien, si retrocedemos a los años en que las pensiones se nos congelaron, o los otros años en que se nos subió por debajo del IPC, y si como se va aprobar las subida solo será del 0,25 % en los años malos „que por cierto son todos desde hace mas de una década„ recuperar el valor adquisitivo de las pensiones llevará más de 20 años, o nos tendrían que hacer una subida de más del 30 %, cosa que jamás va a ocurrir.

La desvergüenza de los políticos está en las horas anteriores de las elecciones, cuando todos los discursos giran sobre sus nuevas ideas y los logros que van a conseguir, también en sus propuestas de beneficios sociales y cómo no, en que sus oponentes no tienen ni pastelera idea. A los jubilados nos prometen de todo porque somos imprescindibles para sus objetivos por ser tan grande nuestro colectivo. Y a la hora de la verdad, cuando ya están ocupando su trono, de lo dicho no hay nada y de lo prometido ni me acuerdo. Y así nos tratan elecciones tras elecciones, los unos y los otros y los otros y los unos. ¡Todos iguales! Para gobernar es para lo único que les interesamos, después se comportan como si fuéramos desechos de la sociedad.

Ahora bien, ¿qué les podría suceder si los jubilados, viudos, viudas y pensionistas hiciéramos un nuevo partido político ya que somos más de 8 millones de personas en esa situación? Y no solo para defendernos del maltrato recibido año tras año, sino también para limpiar las castas políticas actuales, esas descerebradas y corrompidas que nos avergüenzan diariamente, y hacer las cosas guiadas por la experiencia adquirida a través de los años. Posiblemente se parecería algo así como el antiguo Sanedrín donde la cordura y la honradez por fin estarían presentes. Verdaderamente esto es un sueño, y los sueños, sueños son.

Mientras tanto, solo nos queda aguantar todo aquello por donde nos quieran hacer pasar, este es nuestro signo de conformidad. Toni Catalá. Valencia.