Tras seis años consecutivos, todos los transcurridos desde que se inició la crisis, de incrementos considerables en el número de parados registrados en las oficinas del Servef, 2013 ha echado el cierre a sus días con un esperanzador descenso en el desempleo. Son 22.375 los valencianos que al finalizar el año ya no se encontraban en situación de búsqueda de un puesto de trabajo. En el conjunto de España, el dato se elevó hasta las 147.385 personas. Son unas noticias alentadoras que parecen indicar que la economía española, y también la valenciana, puede empezar a otear la recuperación o, al menos, constatar que ya ha tocado fondo. Varios indicadores así lo vienen a esbozar. Sin embargo, el principal problema del país es la elevada tasa de paro „547.360 valencianos seguían inscritos en el Servef al finalizar 2013, y 4,7 millones en España„ y de la disminución de esas cifras dependerá en realidad la salida de esta interminable crisis. Así que hay que congratularse del dato de 2013, pero sin caer en la euforia, porque otros resultados conocidos ayer invitan a la prudencia. Y es que el descenso del paro registrado se ha producido gracias al buen comportamiento de un mes „diciembre„ muy estacional por las contrataciones navideñas. Además, la afiliación a la Seguridad Social se redujo el año pasado en la Comunitat Valenciana en 2.142 personas, lo que indica que se sigue destruyendo empleo. Y no hay que olvidar que el Servef solo registra a las personas apuntadas al paro y es cierto que, entre la emigración y la desesperanza, son muchos los que se han borrado sin haber hallado un empleo.
