Actualmente gracias a las imágenes térmicas de los satélites de elevada resolución (Landsat, Modis, NOAA entre otros) que captan la temperatura en sólo décimas o centenares de metros de resolución podemos analizar la isla de calor urbano superficial. No sólo es interesante hacer estos estudios para analizar la isla de calor urbano, en que la ciudad es bastante más cálida que las afueras, hasta 12º a 14º en los casos más extremos (ciudades muy densas como Girona, ciudades en clima desértico como Phoenix o megalópolis como París), sino sobre todo para analizar como afecta la temperatura al confort térmico humano durante el día. Así en las imágenes diurnas del satélite se observa como las calles con orientación oeste-este hay un importante gradiente térmico entre la parte soleada de estas vías urbanas y la zona sombría, que repercute en una sensación térmica de relativo confort térmico en la zona de sombra y de fuerte calor a la zona soleada. También se observa como las calles con bajo factor de visión del cielo (trama urbana muy densa, calles muy estrechadas o con edificios muy altos) el sector de sombra es muy importante y se observa una isla de frialdad diurna que puede ser fuerte (hasta 7,5º en ciudades como Girona).

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