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Las celebridades

En El Hormiguero anuncian con emoción que ¡por fin! Isabel Preysler estará en el show de Pablo Motos el próximo martes. El programa que casi considera a Will Smith y Tom Cruise parte de la familia está entusiasmado por llevar al plató a la reina de la prensa rosa española, lo que demuestra que el glamour del ¡Hola! está a años luz de Gran Hermano VIP o Sálvame Deluxe, donde las verdaderas estrellas del papel couché ni están ni se las espera. La viuda de Miguel Boyer es una famosa de raza, que ha hecho de su celebridad una exclusiva forma de vida. Casualmente, visita a Trancas y Barrancas para promocionar su propia firma de cosmética, como anuncia la web de Antena 3. Todo tiene un precio.

En campaña o precampaña los políticos tienen la disponibilidad mediática por las nubes e incluso hormiguean. Cristina Cifuentes, candidata del PP a la Comunidad de Madrid, dio sobradas muestras de simpatía y empatía. Tantas que Pablo Motos le lanzó un sincero «no pareces del PP» que sonó como el mayor de los piropos. Muy sintomático a un paso de las urnas. Alguien debería tomar nota.

El Hormiguero se alimenta de los famosos a la vez que sirve a sus intereses promocionales con un éxito y una gracia que lo hace tan atractivo para espectadores como para invitados. Entrevistas amigables e imaginativas donde todos se sienten muy a gusto. Y aunque en este aspecto la palma se la llevó Diego el Cigala, Paulina Rubio también dio juego en su última y reciente visita. Merece incluirse en el subgénero de entrevistas eufóricas, con la mexicana hablando de tequila y de sus vicios, por el título de su nueva canción. A Motos le entraba la risa siguiéndole el juego: «Estoy intentando darte la razón pero no hay manera». Lo que no puede ser no puede ser y, además, es imposible.

SOBREVIVIR A «GH VIP». La simbiosis entre fama y televisión es inevitable aunque el sueño de la popularidad produce monstruos. O fenómenos, porque no son caprichos de Goya sino de los espectadores, empeñados democráticamente en encumbrar a Belén Esteban como su princesa popular. La orgullosa portavoz del barrio gana el concurso porque sí, porque cae bien y la gente se la cree. Donar el suculento premio del encierro agrandará aún más su leyenda, avalada siempre por el audímetro. El éxito de los VIPs en Telecinco es suyo en gran medida y ha inundado la cadena. Sin respiro, los Supervivientes vienen a llenar el hueco con fichajes como Chabelita Pantoja y Nacho Vidal. El actor porno quiere que sus hijos le vean en la tele, por fin vestido, y anuncia que tiene «un pronto muy duro». Todos los juegos de palabras se los va a llevar el mismo.

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