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Julio Monreal

La fe mueve líneas férreas

Mientras todos se lamentaban por el abandono de la línea Zaragoza-Valencia, Opel ha empezado a usarla para sacar sus coches a puerto. No es el AVE pero ya falta menos.

Mucho ha llovido desde que la entonces ministra socialista de Fomento Magdalena Álvarez sorprendió a propios y extraños al anunciar estudios informativos para transformar la línea férrea Valencia-Teruel-Zaragoza, esa vía más obsoleta aún que la de Valencia-Utiel-Cuenca, en una plataforma de alta velocidad y ancho europeo. Era como pasar de la nada al cielo, con una previsión de inversión a la que no se le acababan los ceros.

Naturalmente, y como en tantos otros proyectos (la línea Alicante-Valencia por la costa, sin ir más lejos) el viento se llevó las palabras y los matorrales cubrieron de realidad aquel objeto de deseo.

Sin embargo, hay quien no se conforma ni espera que llegue Papá Estado a resolverle el problema. General Motors, la multinacional propietaria de la planta de automóviles de Figueruelas, ha decidido liarse la manta a la cabeza, desbrozar los raíles oxidados por el abandono y retocar unos andenes para que no chocaran los vagones, y ha empezado a enviar desde la fábrica de Zaragoza convoyes de 550 metros de longitud cargados de coches Opel para su exportación por el puerto de Valencia. Haciendo bueno el dicho de que si uno quiere ayuda encontrará la mejor al final de su propio brazo, la industria automovilística ha decidido rescatar lo que todos, sin hacer nada, daban por perdido. A los lamentos por la demora del corredor mediterráneo se sumó el llanto por el abandono de la línea Valencia-Zaragoza. Parece que Opel, y nadie más, ha visto que la recta es la distancia más corta entre dos puntos, y ha optado por el puerto del Turia en lugar del de Tarragona, sobreponiéndose al mal estado de la vía, al hecho de que no esté electrificada y a algunos inconvenientes más. Y no es que lleve años preparando la línea. Empezó a realizar pruebas en febrero, lo que implica una gran eficacia en el proceso de análisis y toma de decisiones. Ahora, es el turno de que las Administraciones se mojen. Opel ya ha mostrado el camino.

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