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Abrazar el amor

Hubo un tiempo en el que la única referencia televisada de la homosexualidad consistía en chistes de mal gusto a cargo de humoristas que hoy, envejecidos, se encuentran en sus casas añorando esos especiales de nochevieja en los que el país se partía la caja con unos estereotipos que tanto daño han hecho a la sociedad. Las mofas trasnochadas dieron paso con el comienzo de siglo a un aluvión de testimonios en programas vespertinos en los que el invitado, embutido en lycra y adornado con piercings, hacía las veces de personaje a medio camino entre la comedia y el melodrama para entretenimiento del personal. Hasta entonces todo muy exótico y gracioso...

Tuvo que llegar una mítica portada de la revista Zero para que España empezara verdaderamente el camino hacia la igualdad, el protagonista valiente era Jesús Vázquez. El presentador por excelencia se presentaba como es, despojado de esa ambigüedad a la que acostumbraban los personajes públicos patrios y abriendo de golpe la mente de muchas madres que abandonaban el desconocimiento para ver en ese chico que tan bien les caía, un ejemplo de normalización ante presentimiento de que su hijo podía ser igual. Mi madre fue una de ellas y a Jesús le estaré eternamente agradecido por un gesto que supuso un gran comienzo para vivir la vida y hacerlo con felicidad. Cinco años después llegó la igualdad en forma de legalidad gracias a Zapatero, seguro que la historia se lo reconocerá con el tiempo.

Ha pasado una década y en esta semana de celebración hemos visto orgullosos a la gran potencia abrazar por fin la diversidad, a ayuntamientos de diferentes idearios, vestidos con banderas en tecnicolor y a una Telemadrid que ya no es de Espe, retransmitir en directo por primera vez la máxima expresión de la libertad para querer a quien quieras sin temor a las polillas del qué dirán... Desde la primeras líneas de esta columna al final hemos vivido 15 años televisados y en este punto y seguido, hoy puedo decirlo definitivamente, siento que buena parte del mundo ya respeta el significado del verbo amar.

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