Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

candau

El Valencia de Lim no es exportable

La humillante derrota ante el Bayern Munich podía ser definida con aquella frase de los hombres del tiempo en que avisaban a barcos pesqueros y navegación de cabotaje. La padecida frente a la Roma recordaba el eslogan de la Compañía de los Coches Camas y los grandes Expresos Europeos en que se advertía de lo peligroso que es asomarse al exterior. Estas frases han quedado tan olvidadas como la marejadilla en el Mar de Alborán, isla que la mayoría de los españoles desconoce su existencia más aún su ubicación. Algunas de estas antañonas expresiones podrían servir para analizar el estado actual del Valencia L.M.N (Antes C.F.). De momento no es equiparable a los grandes.

Amadeo Salvo, que ahora quiere ser el gran salvador del equipo de Ibiza, a tal misión se debió dedicar antes de traer lo que ha traído. Se prometieron grandes fichajes para poder competir con Real Madrid y Barcelona. De la misma manera que en los planes de terminación de las obras del Nou Mestalla está en convertir el proyecto cinco estrellas en tres y gracias, la plantilla actual no tiene nada que ve con las promesas. Supongo que los planes que se anunciaban no están fundamentados en Vezo, André Gomes, Rodrigo, Negredo y Cancelo que ya estaban en el club. Santi Mina, que parece ser el gran fichaje «galáctico» con el que impulsar al equipo a las grandes conquistas, además de Ryan, Bakkali y Danilo Barbosa. Los 109 millones que se dice han sido invertidos son pura falacia porque las cuentas se parecen a las del Gran Capitán porque hay que centrarlas en dos años.

La actual presidenta, que aunque catecúmena ya predica, nos quiere convencer de que el club trata de fichar jugadores con que hacer equipo en lugar de figuras. Cuando la señora presidenta, Layhoon Chan, dice que el Valencia lidera la inversión en fichajes no acaba la frase. Debería decir que fomenta inversiones del grupo mercantil Lim-Mendes. El Valencia ha pagado precio desmesurado por jugadores como Enzo Pérez y se sospecha, con fundamento, que si alguno de los jovenzuelos destaca el encargado de la venta será su empresario, el señor Mendes y el Valencia solamente habrá sido su plataforma de lanzamiento, pero sin réditos. Hoy no hay operación de compra o venta en la que no intervenga el señor Mendes, socio asociado en sociedad con el señor Lim.

El Valencia glorioso de Lim, el Mesías que nos trajo Salvo, no ha aportado las alegrías de fichajes como se prometía. No ha sido el caso de Atlético de Madrid, Real Madrid, Barcelona, Sevilla o Villarreal.

Posdata. Otamendi, salvo venta precaria, puede servir para enjugar los desembolsos por los jugadores de la casa Mendes.

Compartir el artículo

stats